Zabaleta insiste en la autoexclusión de tres parlamentarios

El coordinador general de Aralar, Patxi Zabaleta, había conseguido eludir toda la tanda de preguntas del coloquio posterior a su charla en el Fórum Europa, en Bilbao, sin que tuviera necesidad alguna de referirse al incómodo conflicto interno planteado en su formación a raíz del apoyo de tres de sus cuatro parlamentarios vascos a la creación de una ponencia sobre la paz.

La curiosidad de los asistentes se había reducido a cuestiones económicas, políticas o, incluso, del agro navarro. Al finalizar el acto, los periodistas levantaron su voz para advertir a Zabaleta y a la organización de que habían omitido una pregunta sobre este conflicto interno. El coordinador general demostró que no tenía responsabilidad alguna hasta el punto de que atendió la curiosidad mediática. Minutos después dijo que Aintzane Ezenarro, Mikel Basabe y Oxel Erostarbe “se habían autoexcluido” de la disciplina de Aralar al mantener su apoyo a una ponencia que no incluye la presencia de la izquierda abertzale.

Estudia un informe del precedente de escaños que dejaron sus siglas

En la presentación de la conferencia, Dani Maeztu, el único parlamentario que acata la consigna de Aralar sobre la polémica ponencia de paz, ya había asumido que los periodistas iban a estar más interesados por las cuestiones negativas que por las aportaciones de su partido a la unidad de una izquierda abertzale cada vez más poderosa. Maeztu aprovechó su intervención para recordar intencionadamente cómo Zabaleta fue capaz de renunciar a su cargo en el Ayuntamiento de Pamplona como portavoz de Batasuna cuando se alejó de sus postulados, en un nítido mensaje para sus compañeros de escaño en la Cámara de Vitoria.

De momento, Zabaleta prefiere esperar a las conclusiones de la comisión interna del partido para decidir el futuro de Ezenarro, Basabe y Erostarbe en Aralar. Pero ya es conocido que se les considera “autoexcluidos” después de "una serie de precedentes" y no solo por la discusión respecto a esa ponencia. Aralar no va a dar un paso más, pero ha empezado a analizar “un precedente” en la Cámara vasca de representantes que se apartaron de las siglas políticas con las que concurrieron a las elecciones.