La juez mantiene en prisión a dos de los detenidos el 29-M

Ismael B. A. y Daniel A. S., dos de los jóvenes detenidos durante la huelga general del pasado 29 de marzo, seguirán durmiendo entre rejas. La titular del Juzgado de Instrucción número 18 de Barcelona, Carmen García, ha rechazado el recurso de sus abogados y ha decidido mantener la medida de prisión provisional que dictó en su día con el argumento de que podrían participar en futuros altercados. A su juicio, los jóvenes deben seguir en prisión por el riesgo de fuga y para evitar la "reiteración delictiva".

Sobre el riesgo de fuga, la juez precisa que los hechos son graves, a pesar de que los abogados traten de "minimizarlos". La jornada de huelga, unas 90 personas cortaron el tráfico en la Diagonal "a las nueve de la mañana de un día laborable, generando un paro completo y brusco de la circulación", según el auto. "No es necesario hacer un gran esfuerzo imaginativo", sigue la juez, para "representarse la situación de extrema gravedad" que generó el comportamiento de los imputados. Los miembros del piquete "agredieron con piedras y huevos" a los agentes, aunque Ismael y Daniel negaron haber participado en esos hechos.

Los abogados argumentan que los delitos que les atribuyen los Mossos d'Esquadra -desórdenes públicos, contra la seguridad vial y daños- no son tan graves ni implican una pena excesiva como para acordar la prisión provisional. Pero la juez replica que "la tipificación penal" no es cosa de la policía y considera que los hechos son más graves: delito de atentados agravados, tenencia de elementos peligrosos, resistencia y lesiones.

En el registro, los policías hallaron en la mochila de Ismael material incendiario, además de un walkie talkie y prendas para ocultar el rostro. El joven negó ser propietario de esa mochila. Su objetivo, por tanto, era "comunicarse con otros" y "evitar ser identificado" durante la manifestación. Según la magistrada, los jóvenes formaron parte de un grupo que "de forma premeditada ha decidido atentar contra la paz pública, de forma coordinada con terceras personas y utilizando medios y modos que revelan una alta peligrosidad criminal".

Los agentes de paisano, sigue el auto, realizaron un seguimiento de los dos jóvenes al entender que "constituían los elementos más agresivos del grupo". El atestado ofrece "coherencia y credibilidad". La juez aprovecha para lanzar una "reflexión" sobre la reforma del Código Penal de 2010. En su opinión, ha supuesto una rebaja en la pena por el delito de daños mediante incendio.

En el auto también se reprocha que los imputados no han acreditado de forma suficiente su situación familiar, laboral y económica. Los escritos "carentes de firma" aportados por amigos,  que solo manifiestan su "fe en su buen comportamiento (es bueno, tímido, reservado, estudioso, no creo que haya hecho esto)" son "meras opiniones" y, por tanto, "irrelevantes".