La línea L-9 costará 10.000 millones más de lo previsto
CiU reconoce que es la obra que "acumula más despropósitos" en la historia del metro de Barcelona
El grupo de CiU ha admitido hoy que, aunque las obras de la línea 9 del Metro del área barcelonesa costarán unos 6.000 millones de euros, en realidad habrá que pagar 16.000 millones por las cargas económicas que implica la "financiación aplazada" de esta infraestructura.
Esta situación ha sido reflejada en la sesión de control del Parlament al ejecutivo catalán por el diputado de CiU Josep Rull, al indicar que, aunque la Línea 9 "es el proyecto de obra pública más ambicioso que hay en Cataluña de los últimos tiempos", es también "el que acumula más despropósitos" en la historia del metro de Barcelona y su área metropolitana.
Según Josep Rull, el coste de construcción de la línea 9 se ha duplicado en relación con el presupuesto que se había calculado inicialmente, y ahora mismo asciende a unos 6.000 millones de euros. Ha recordado, en este sentido, que la línea 9 será una de las líneas subterráneas con más longitud de toda Europa y que, además de interconectar con las líneas ya existentes, servirá para comunicar el Aeropuerto del Prat con la ciudad de Barcelona.
Ha precisado asimismo que aunque el coste de la línea 9 es de unos 6.000 millones de euros, en realidad la Generalitat deberá pagar 16.000 millones como consecuencia del hecho que "se ha abusado de la financiación aplazada", ha explicado.
"Resulta evidente que las cosas no se han hecho bien", ha reconocido Rull con respecto al proyecto de esta línea, que fue aprobado inicialmente por el último ejecutivo de Jordi Pujol y que, después de las dos legislaturas de gobiernos tripartitos, ha vuelto a ser gestionado por otro gobierno de CiU.
El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Lluís Recoder, ha coincidido con Rull en que la Línea 9 tiene un problema de financiación, y que su departamento ha tratado de responder a la pregunta de "cómo podemos pagar lo que cuesta" teniendo en cuenta que "estamos en un momento de restricción presupuestaria y con facturas heredadas" de épocas anteriores.
Según Recoder, la solución pasa por "la renegociación del contrato" que posibilita la construcción del proyecto y su financiación.
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