Estrangulado un nonagenario mientras dormía la siesta
En el interior del domicilio encontraron maniatada a la mujer del anciano asesinado
Un hombre de 93 años, G.M.S., fue estrangulado ayer hasta la muerte con una cuerda mientras tomaba el sol en una silla de playa en su casa de Pazos, en las afueras de la ciudad. El anciano se había sentado junto al muro de la vivienda, una modesta construcción de dos plantas en la zona rural, cuando un asaltante lo sorprendió, posiblemente, mientras dormitaba.
El cadáver fue hallado a las cuatro de la tarde por un sobrino nieto de la víctima que se asomó a la finca familiar y logró ver como un individuo salía huyendo de la propiedad y se esfumaba campo a través. El fallecido todavía tenía la cuerda que lo asfixió rodeándole el cuello.
En el interior del domicilio, los agentes de la Policía Nacional encontraron maniatada a la mujer del anciano asesinado, que estaba tendida en la cama en una de las habitaciones.
La esposa, de 78 años, padece alzhéimer y fue traslada en ambulancia al hospital Arquitecto Marcide de Ferrol, donde permanece ingresada aunque su estado no reviste gravedad.
Los investigadores barajan el robo como uno de los móviles más probables del crimen aunque mantienen abiertas otras hipótesis. Agentes de la brigada científica han tomado muestras y restos biológicos en la casa para tratar de esclarecer un asesinato cometido a plena luz del día en una casa humilde y habitada por dos ancianos.
La Policía, que ayer permaneció toda la tarde en la zona, retomará hoy las pesquisas y las inspecciones en la vivienda para tratar de dar con el, por ahora, único sospechoso del crimen. El juzgado de Instrucción número 1 de Ferrol, que estaba de guardia, ha abierto una investigación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.