PP y PSE buscan recobrar un clima de confianza sobre la ponencia del fin de ETA

Dirigentes del PP y del PSE están buscando recuperar un clima de confianza que permita avanzar hacia un acuerdo para sacar adelante la constitución de una ponencia en el Parlamento que contribuya a acelerar el fin de ETA. Para “rebajar la tensión y quitarle foco de encima”, en palabras de uno de los directamente implicados en las negociaciones, hasta mañana o el próximo jueves no entrarán de nuevo a negociar, con el consejero de Interior y coordinador del Gobierno, Rodolfo Ares, y el número dos del PP vasco, Iñaki Oyarzábal, como principales responsables por ambas partes de desbrozar el camino hacia un acuerdo.

El objetivo es que todas las partes reciban “certezas”, en expresión de las fuentes informantes”, que contribuyan a poner un marcha un órgano que todos los implicados se dicen dispuestos a sacar adelante. El escollo será de nuevo cómo abordar la relación de ese foro con una izquierda abertzale que lo sigue desdeñando.

El margen de la negociación se extiende hasta el próximo día 22, cuando vuelva al pleno de la Cámara, como previsiblemente sancionará hoy su Junta de Portavoces, el debate de la moción de Aralar que sirve de punto de partida para la creación del foro parlamentario. La otra principal apuesta que el lehendakari, Patxi López, lanzó el pasado jueves en la Cámara, la creación de un Comisionado para la Convivencia que gestione todas las políticas del Ejecutivo en esta materia, se hará hoy realidad oficial con el nombramiento por el Consejo de Gobierno del hasta ahora parlamentario del PSE Jesús Loza para ocupar ese puesto. Loza mantendrá mañana mismo su primera reunión oficial con el lehendakari. La ejecutiva del PSE decidió ayer que Mikel Unzalu releve a Loza, quien hoy formalizará su renuncia en la Cámara, en la que lleva desde 2001, como secretario primero de la Mesa del Parlamento. La juntera alavesa Loli Escudero se incorporará al grupo parlamentario para ocupar el escaño que deja vacante Loza.