El factótum de Fenoll resurge en Orihuela
Sus intereses y los del PP subyacen en la huida de un edil que ha dejado en minoría al tripartito El abogado del empresario del caso Brugal acudió al Ayuntamiento para hablar con el secretario
El factótum Ángel Fenoll ha reaparecido en la escena pública de Orihuela, apenas un año después de que su mentor, el PP local, fuera descabalgado del gobierno local por el tripartito integrado por el PSPV, Los Verdes y la coalición del Centro Liberal Renovador-Claro.
La salida del concejal británico Bob Houliston del gobierno ha dejado al tripartito a los pies de los caballos y en minoría. Desde el gobierno apuntan que detrás de la espantada de Houliston está el industrial Ángel Fenoll, cuyos intereses económicos vuelven a confluir con las aspiraciones políticas del PP por recuperar el control del Ayuntamiento, salpicado de múltiples casos de corrupción y cuna del caso Brugal.
La salida de Houliston del gobierno se produjo apenas unos días después de que el tripartito acordara rescatar provisionalmente la contrata de la basura. La concesionaria es una UTE integrada por tres empresas. Dos de ellas, según la investigación del caso Brugal, son tapadera de Fenoll. Éste ha logrado convertirse en el industrial hegemónico del negocio de la basura, desde que en 1987 el entonces alcalde del PP, Luis Fernando Cartagena, le adjudicara a dedo el servicio en la costa oriolana.
El más explícito a la hora de apuntar al PP como muñidor de la fuga de Houliston es su antiguo socio de coalición Pedro Mancebo, portavoz del Centro Liberal. “La hoja de ruta de la salida de Houliston la ha escrito el PP en colaboración con Ángel Fenoll, y la prueba es la presencia su abogado para comprobar las posibilidades de un voto de censura”, afirma Mancebo. El edil considera que su homólogo británico ha traicionado los intereses de la formación que le arropó y se “ha entregado al PP”. Houliston, por su parte, elude hacer comentarios sobre el futuro político, pero remarca: “No he autorizado a nadie a representarme”.
Sin embargo, el pasado miércoles apareció en escena Isidro Hernández, abogado de Fenoll. Hernández se reunió con el secretario municipal y, entre otras cosas, le preguntó si Houliston podía firmar una moción de censura. Aunque la contestación del funcionario fue negativa, ahora el alcalde, Monserrate Guillén y Mancebo interpretan que el mismo letrado de Fenoll actúa como asesor legal de Houliston. El PP rechaza la acusación y niega la mayor.
Mancebo: “La hoja de ruta de la salida de Houliston la ha escrito el PP en colaboración con Ángel Fenoll"
La portavoz del Grupo Popular y exalcaldesa, Mónica Lorente afirma: “Yo no he hablado con Houliston. El problema es del tripartito que sale a disputa interna diaria, sin que el alcalde (Monserrate Guillén, de Los Verdes) dé la cara y expliqué a los ciudadanos qué piensa hacer y cuáles son sus proyectos, entre ellos, el próximo presupuesto municipal”. La exregidora se desmarca de la polémica de la basura: “Nosotros nos hemos abstenido en el rescate, pero lo apoyaremos siempre que el equipo de gobierno, mediante los oportunos informes técnicos, acredite su legalidad y oportunidad”.
Otras fuentes municipales admiten que el PP sí mantiene contactos con Houliston, a través del concejal Antonio Rodríguez Barberá. A Lorente, según esas fuentes, le urge llegar a la alcaldía de cara al congreso provincial de los populares y, sobre todo, ante una hipotética imputación en el caso Brugal. El fiscal acaba de hacer esa petición al juez.
Y la portavoz socialista y primera teniente de alcalde de la ciudad, Antonia Moreno, interpreta que todo obedece a “los problemas internos de una coalición electoral [CLR-CLARO]sobre los que el resto del Gobierno nos hemos mantenido al margen”, pero reconoce que “la inestabilidad que ha provocado la dimisión de Houliston nos ha arrollado a todos”.
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