Los sindicatos vaticinan una "oleada" de ERE tras la reforma laboral

La reforma laboral que ayer entró en vigor facilita el despido y traerá "una oleada de expedientes de regulación de empleo (ERE)" en empresas que "estaban esperando" el cambio legislativo. Es la percepción que tienen los sindicatos CC OO y UGT, cuyo secretario general, Josep Maria Álvarez, alertó ayer en Barcelona de que en las próximas semanas se asistirá a la presentación de un gran número de expedientes y que la nueva norma "es un atraco a las garantías del derecho del trabajo".

Álvarez y su homólogo en CC OO, Joan Carles Gallego, comparecieron para evaluar una reforma que calificaron de "ineficaz, inútil e injusta" y que consideran "un ataque contra los trabajadores". Los dos sindicatos llamaron a la ciudadanía a manifestarse en Barcelona, Tarragona, Girona, Lleida y Tortosa el próximo domingo a mediodía. Además, anunciaron movilizaciones "sostenidas y crecientes" durante esta semana, cuando también promoverán encierros en los salones de plenos de los Ayuntamientos el jueves de diez de la mañana a doce del mediodía. Las dos organizaciones promoverán mociones para que los Consistorios se declaren contrarios a la reforma, para lo que piensan contactar con las dos entidades municipalistas, la Federación de Municipios y la Asociación Catalana de Municipios.

Gallego considera la reforma "injusta porque no ayuda a combatir la crisis, inútil porque facilita más paro y que la gente se quede sin trabajo de forma unilateral, e injusta porque deja la democracia en la puerta de las empresas y esto generará conflictividad entre los trabajadores y los empresarios y entre los propios empleados". Los secretarios generales de los dos grandes sindicatos reprocharon al Gobierno que preside Mariano Rajoy que la reforma "se haya hecho al margen del diálogo social" y recordaron que "la Constitución determina que los cambios en materia laboral sean consultados" a los sindicatos y empresarios.

La manifestación de Barcelona está convocada en el paseo de Gràcia, la avenida que ha sido escenario de las grandes movilizaciones, como las históricas a favor del Estatuto de Cataluña, contra la invasión de Irak y contra atentados de la banda terrorista ETA. "Queremos que sea masiva y que la ciudadanía plasme su malestar", dijo Gallego, que invitó de forma especial a dos colectivos a salir a la calle: los parados y los jóvenes.

A juicio de Álvarez, la "contrarreforma" tiene por "único objetivo una rebaja del precio del despido". "No hay ninguna medida dirigida a la creación de ocupación", aseguró, y repasó cambios que introduce el decreto ley, como la generalización del despido con indemnización a 20 días, los ERE sin mediación de la autoridad laboral y la "precarización de la contratación indefinida". "En el plazo de un año y tres meses los empresarios pueden cobrar todas las ayudas previstas y echar a la calle a un trabajador para contratar a otro en las mismas condiciones", aseguró el secretario general de UGT. Álvarez también alertó de que "ningún programa de ningún partido político había insinuado medidas como las que la prevé la reforma laboral".

Los responsables de CC OO y UGT en Cataluña recordaron que llevan meses defendiendo que hay alternativas a la nueva ley: "La reforma financiera que obligue a los bancos a abrir el grifo del crédito, la reforma fiscal que combata el fraude y haga pagar a los que más tienen, y un cambio en el modelo productivo". Ambos se mostraron convencidos de que lograrán "ganar la batalla y detener la reforma" durante su trámite parlamentario y, como apuntaron las direcciones federales de los sindicatos, han cuestionado la constitucionalidad de la reforma. "Tras esta reforma hay una improvisación y una falta de rigor jurídico brutales", zanjó Álvarez. Ni UGT ni CC OO descartan la convocatoria de una huelga general.