Alumnos de un colegio de Ourense protestan por que no tienen calefacción en las aulas

Los 300 escolares que cada día acuden al colegio Amadeo Rodríguez Barroso en Ourense además de recibir clase pasan mucho frío, ya que la calefacción lleva semanas fallando y son más de 40 los alumnos enfermos por culpa de las bajas temperaturas que hay en las aulas. Alertados por el personal del colegio la Asociación de Padres descubrió que la calefacción fallaba muy a menudo e incluso había días que ni siquiera funcionaba, como sucedió a la vuelta de vacaciones de Navidad cuando estuvo sin hacerlo durante cuatro días.

La dirección del centro reconoce que han tenido problemas con la instalación eléctrica lo que hacía que se tardara más tiempo en calentar el colegio, pero afirma que la situación está solucionada: “Ayer estuvo un técnico y arregló el problema. Todo funciona con normalidad y los niños están dando clase sin problema y a una buena temperatura”.

Sin embargo, los padres dudan de que los problemas estén resueltos y se quejan de la falta de información por parte del colegio. Con el apoyo del ayuntamiento han conseguido que una empresa independiente mida la temperatura real que hay en el centro escolar, sin las estufas que están colocadas y que instalaron los propios padres con la ayuda de los profesores. “Esto no va a quedar así, hemos pedido una reunión con el delegado de la Xunta, pero vamos a llegar donde haga falta, porque es un colegio muy nuevo”, aseguró la presidenta de la asociación de padres, Sandra Pereira.

Con el apoyo del ayuntamiento han conseguido que una empresa independiente mida la temperatura real que hay en el centro escolar

Los problemas en el centro empezaron poco después de la inauguración, hace dos años, ya que se calentaba con un sistema de biomasa que dejó de funcionar a los pocos días. El verano pasado se realizaron obras para reemplazarlo por una calefacción de gasóleo pero los problemas continuaron y no solo en invierno ya que en los meses de mayo y junio se registraron altas temperaturas en las aulas porque el aire frío también fallaba.