El Ayuntamiento de Barcelona desaloja otra finca del barrio del Raval

Veinticuatro horas después de desalojar el edificio del número 55 de la calle de Sant Antoni Abat, en el barrio del Raval de Barcelona, los bomberos han vaciado esta tarde la finca colindante, la del número 53. Los ocho vecinos que residen en este último bloque han tenido que dejar sus viviendas por el mal estado del edificio, que hacía peligrar su seguridad. Este deterioro fue el causante del desprendimiento, a última hora de la tarde del miércoles, de parte de la pared medianera entre ambos bloques. Por ese motivo fueron desalojadas las 14 personas que vivían en ese edificio. Los servicios sociales municipales han atendido a todos los afectados.

Los vecinos del número 55, propietarios en régimen de comunidad horizontal, llevaban tiempo denunciando el mal estado de la finca colindante. Manipulaciones en los depósitos del agua y otros problemas provocaban filtraciones que fueron las que finalmente causaron la caída de parte de la pared medianera el miércoles. Las quejas sobre el mal estado de la finca y la existencia de pisos patera en ella llegaron a la Síndica de la ciudad en 2006. Desde entonces esa institución ha instado al Ayuntamiento a que actúe. "Si la propiedad no mantiene la finca como es debido, el Ayuntamiento está obligado a tomar cartas en el asunto" sostiene Maria Assumpció Vilà, la síndica de Barcelona.

El distrito de Ciutat Vella tiene un amplio historial de la finca del número 55 de Sant Antoni Abat y en 2005 requirió que se hiciesen las obras de conservación necesarias. Desde entonces a la propiedad le han impuesto tres sanciones. Pero el inmueble en cuestión seguía deteriorándose. Un comunicado del Consistorio apunta que ahora se está estudiando la posibilidad de ejecutar de forma subsidiaria las obras de adecuación necesarias. "Lo tenían que haber hecho hace tiempo", opina la síndica.