España se enfrenta a la Navidad con una ola de covid diferente: con menos hospitalizados pero en el camino a un récord de contagios

La situación del virus sigue complicándose en España. Coincide una ola de contagios que se disparan exponencialmente en todas las comunidades, el aumento de los ingresos hospitalarios, y la incertidumbre añadida de una variante ómicron que ha irrumpido súbitamente. A continuación, un repaso con las claves de la situación a una semana de la Navidad.

1. Los casos explotan en España y media Europa, camino de cifras récord. Los contagios detectados en nuestro país se han doblado prácticamente en una semana: han sido 149.000 en los últimos siete días, frente a los 83.000 de la semana anterior. Parece inevitable que superaremos el pico de contagios de la ola de julio; y es posible que se acabe batiendo la peor cifra de la pandemia, los 259.000 contagios en una semana de enero de 2021.

Reino Unido, Francia o Dinamarca ya están en récord de casos detectados, como muestra el gráfico:

El gráfico dice que la nueva ola española está creciendo tan deprisa como lo hizo en enero pasado, aunque por entonces apenas había vacunas que frenaran la transmisión.

Además, la velocidad podría estar aumentando, si lo que estamos viendo es una ola de ómicron que se levanta sobre los contagios de delta. Sabemos que eso está ocurriendo en el Reino Unido y Dinamarca, que tienen los mejores datos de secuenciación: allí los casos de la variante se están doblando cada dos o tres días, según cálculos del biólogo Trevor Bedford.

Es difícil exagerar el ritmo de los contagios: “Estamos viendo unos crecimientos de los peores que habíamos visto hasta ahora”, subrayó este viernes Maria Van Kerkhove, jefa técnica de la Organización Mundial de la Salud para la covid. “Más casos significa más hospitalizaciones”.

2. Está pasando en toda España. Hay diferencias de incidencias entre comunidades (con cinco veces más contagios detectados en Navarra que Andalucía), pero cuando hacemos el gráfico logarítmico, lo que aparecen son líneas rectas de igual pendiente: eso significa que el virus crece exponencial, y a la misma velocidad, en todas partes.

La línea recta es nítida. Si acaso, en lugares como Madrid, su pendiente da señales de elevarse en la última semana, coincidiendo con el despegue de la nueva variante.

3. Parece claro que hay una ola ómicron en España. En Madrid hay hospitales donde el 60% de los diagnósticos son ya casos de esta cepa y en Barcelona se habla del 25%. Son cifras que se mueven por horas (solo este viernes, tuve que actualizar este párrafo tres veces).

Sabemos que son los casos de ómicron los que están levantando las olas en Dinamarca y Londres. Lo natural es pensar que aquí ocurre lo mismo.

4. Ya no son solo casos: los ingresos hospitalarios también crecen. Aunque la vacunación estará evitando que muchas infecciones se agraven, la ola actual de contagios todavía se traduce en un claro aumento de ingresos hospitalarios. ¿Cuánto en comparación con olas anteriores? Para verlo he preparado este gráfico, con cifras de casos, ingresos y fallecimientos en relación con los picos de la ola de Navidad 2020.

El gráfico trae una buena noticia: por cada caso de covid, ahora los ingresos hospitalarios no son ni la mitad que hace un año, gracias a la protección que nos ofrece la inmunización. El pasado 12 de enero, en España hubo unos 23.000 casos y 2.300 ingresos; este jueves hay los mismos casos diarios, pero 870 ingresos.

La noticia mala es que todavía son bastantes hospitalizaciones. La proporción por cada casa, de momento, es similar a la que vimos en la ola de este verano: el 17 de julio hubo también 23.000 casos y 1.000 ingresos, casi los mismos que estos días.

Estos datos de ingresos corresponden seguramente a personas infectadas por delta. ¿Cambiarán las proporciones de ingresos por caso ahora que sube ómicron? Es posible que sea así, aunque es una duda a despejar en los próximos días.

5. Las últimas evidencias sobre ómicron confirman su capacidad para infectar a más personas vacunadas, pero no resuelven todavía las incógnitas sobre su severidad.

Está confirmado que ómicron es hábil escapando a nuestras defensas, para causar reinfecciones o contagiar a gente vacunada. En Dinamarca, el 83% de los casos son personas vacunadas. En el Reino Unido, las reinfecciones se han multiplicado: son el 0,4% de los casos de delta, pero suben al 7% de los casos ómicron.

La pregunta clave, no obstante, sigue sin dilucidar: desconocemos la capacidad de ómicron para causar una enfermedad grave, en general, en personas vacunadas con dos dosis o tres dosis. Sabemos que la variante está causando menos ingresos que las de otras olas, pero eso puede explicarse de diferentes maneras: puede que sea menos grave, puede que la vacune evite ingresos, o una mezcla ambas cosas.

Un estudio preliminar con datos de Sudáfrica dice que dos dosis de Pfizer tienen una eficacia contra la hospitalización del 70%, que no está mal, pero que no es fantástica. Sí, evitará la mayoría de los ingresos de una población sin inmunizar. Pero supondría una pérdida importante de protección en comparación con la que tenemos contra delta (93%): los ingresos que la vacuna no evita pasarían del 7% al 30%, es decir, serían cuatro veces más. Espero que la protección acabe demostrándose mejor que eso.

Las autoridades del Reino Unido actualizan una evaluación de riesgo sobre la gravedad de ómicron, que mantienen sin conclusión, por “datos insuficientes”. Pero este viernes añadieron una nota: “En los datos disponibles en el Reino Unido, no hay señales para sostener una diferencia intrínseca de virulencia del virus ómicron comparado con delta”.

6. Aunque ómicron resulta menos grave, su transmisibilidad todavía puede ser muy problemática. Se está contagiando tanto, que incluso una pequeña proporción de casos graves puede acabar suponiendo un número muy elevado. Lo subrayaba Bill Hanage, epidemiólogo de Harvard: “No hay muchas cosas que puedan propagarse así de rápido y ser benignas para una sociedad que tiene los hospitales llenos”.

Es la misma precaución que transmitió este viernes Maria Van Kerkhove, de la OMS: “Todavía estamos aprendiendo sobre la gravedad [de omícron]. Tenemos informaciones iniciales que dicen que es menos severa que delta. Sin embargo, si tenemos más casos, eso significa más ingresos, y si los sistemas de salud están saturados, la gente morirá porque no recibirá el tratamiento que necesita”. La experta acabó con una recomendación que conocemos: “Vacúnate cuando puedas y asegúrate de tomar medidas para reducir tu exposición a este virus”.

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