El independentismo presiona para que Mas vaya a la Diada

Artur Mas no acudió a ninguna de las tres manifestaciones independentistas celebradas en Cataluña con motivo de la Diada del 11 de septiembre con el argumento de que había de preservar su función institucional, aunque hasta última hora alimentó la duda sobre su presencia. La historia se vuelve a repetir este año, con la marcha convocada en la avenida Meridiana de Barcelona y que coincide con el primer día de la campaña electoral. Algunas voces del independentismo han empezado a reclamarle que acuda a la manifestación.

Eduardo Reyes, presidente de la entidad Súmate y número seis de la candidatura Junts pel Sí, ha explicado este miércoles que el presidente de la Generalitat debería acudir a la marcha, al igual que cualquier persona que desee la independencia de Cataluña.

Como ya ocurrió en las tres ediciones anteriores, la marcha de la Diada está convocada por la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural. Esas organizaciones son impulsoras de la candidatura en la que Mas ocupa el número cuatro y Oriol Junqueras va de número cinco. Las presidentas de las entidades hasta hace unas semanas, Carme Forcadell y Muriel Casals, también ocupan los puestos número dos y tres en esa lista, respectivamente.

Esas coincidencias hacen inevitable que la marcha de la Diada pueda derivar en un acto electoral. Para huir de ese planteamiento, el actual presidente de la ANC, Jordi Sánchez, reclamó "una moratoria de la campaña", con el fin de que la Diada "no sea un espacio de confrontación o exhibición electoral".

Sánchez disculpó la posible ausencia de Mas y explicó que sería "perfectamente normal" que no acudiera. "Entenderemos que mantenga criterios de años anteriores, como también que quisiera venir", dijo. En el mismo sentido, el consejero de Cultura, Ferran Mascarell, aseguró que Mas "hará lo que sea más conveniente".

Mas recibió cada año en el Palau de la Generalitat a los organizadores de las manifestaciones

Pese a no haber acudido a ninguna de las manifestaciones anteriores, Artur Mas recibió cada año en el Palau de la Generalitat a los organizadores de las manifestaciones o bien les transmitió su solidaridad en el mensaje institucional que dirige con motivo de la Diada.

La posible instrumentalización de la marcha por la candidatura Junts pel Sí ha llevado también a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, a marcar distancias, de manera que tampoco se sabe aún si acudirá o no. Con todo, el Ayuntamiento sí que ha anunciado que tendrá "alguna participación" en la movilización. Casi ninguno de los consejeros de la Generalitat ha faltado a esas citas y ayer ya se anunció la presencia de la vicepresidenta y portavoz, Neus Munté.