El yihadista Coulibaly trajo a Madrid a toda su familia para que volara a Siria
La policía investiga si un pasador de fronteras se unió en España al grupo El terrorista pasó los Pirineos en la noche del 1 al 2 de enero y volvió solo a Francia
Amédy Coulibaly, el yihadista que la semana pasada mató a cinco personas en París, estuvo el pasado 2 de enero en Madrid, hasta donde llevó en coche a su familia directa para que esta volase sin despertar demasiadas sospechas a Estambul antes de cruzar a Siria. Coulibaly entró conduciendo el 1 de enero en España acompañado de su pareja, Hayat Boumeddiene; un hermano, la esposa de este y el hijo de ambos, según fuentes de la investigación.
El grupo se reunió en el aeropuerto de Madrid-Barajas con el joven francés Mehdi Sabri Belhoucine —un supuesto facilitador del paso de la frontera turco-siria— para tomar el vuelo de la compañía Pegasus que partía a las 14.25 a Estambul. Solo quedó en tierra Coulibaly, quien volvió a Francia conduciendo el coche y, seis días después, comenzó su escalada criminal en París. Ni la Policía ni la Guardia Civil han detectado por ahora contactos, ni físicos ni telefónicos, del yihadista con otras personas en España.
Llamada a las filas del Estado Islámico
Los servicios antiterroristas tienen el convencimiento de que Hayat Boumeddiene, la esposa de Amédy Coulibaly, ha entrado al servicio del Estado Islámico (EI). La propaganda de esta organización terrorista reclama constantemente el enrolamiento de mujeres y niños para servir a los combatientes y “repoblar” el territorio conquistado. Los investigadores estiman que el asesino del supermercado consideró a salvo a su mujer, a su hermano y su pareja y el hijo de ambos cuando estaban fuera de Francia, ya entregados al EI. No era un viaje improvisado: Coulibaly había pedido recientemente un préstamo con el que supuestamente pagó los billetes de avión, el alquiler del coche y, posiblemente, las armas.
El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ya ha abierto diligencias para investigar la estancia en España de Coulibaly, su esposa y una tercera persona que podría haber ayudado a esta a huir a Siria. La presencia de estos en España fue adelantada el miércoles por la televisión francesa M6. El magistrado ha recibido un informe de la Policía al respecto y ha ordenado que se investigue un supuesto delito de colaboración con banda terrorista.
Las primeras informaciones apuntaban a que Coulibaly y su pareja estuvieron en Madrid entre el 31 de diciembre (cuando alquiló el coche en Francia) y el 2 de enero, e incluso algunos días más. Sin embargo, los últimos datos recabados por los investigadores apuntan a que el grupo pasó los Pirineos la noche del 1 al 2 de enero y que no estuvo ni 24 horas en España. Pero el itinerario preciso del coche y sus ocupantes está por aclarar.
Los servicios antiterroristas españoles no han encontrado por el momento ningún registro de que pudieran haberse alojado en hoteles, hostales o pensiones de Madrid. No obstante, siguen sin descartar que Coulibaly —o alguien relacionado con él— hubiera contado con algún tipo de apoyo en Madrid. La policía gala ha informado de que en el registro de llamadas del móvil francés del yihadista no figura ninguna comunicación a ningún número en España, pero sí seis comunicaciones con teléfonos franceses, según fuentes cercanas a la investigación.
Coulibaly supuestamente alquiló el coche el 30 de diciembre y lo devolvió el 6 de enero, dos días antes de matar a una policía municipal. Al siguiente, el viernes 9, asesinó a cuatro judíos franceses en un supermercado kosher de París. El 2 fue cuando su mujer tomó el vuelo de Madrid a Estambul. Con estos datos, los investigadores franceses informaron de la posibilidad de que ambos hubieran pasado Nochevieja y Año Nuevo en Madrid.
Los agentes ya han revisado las cámaras del aeropuerto de Madrid y han localizado a la joven Hayat Boumeddiene (o Boumeddien, con ambos apellidos figura en su ficha) en compañía de otros tres adultos y un niño. Se trata de un hermano de Coulibaly, la esposa de este y el hijo de ambos. Las fuentes no han precisado sus identidades. El tercer adulto es Mehdi Sabri Belhoucine, francés de 23 años, con quien Boumeddiene fue grabada en el control fronterizo del aeropuerto de Estambul.
Cómo llegó Belhoucine a Madrid no está aclarado. Lo que sí se sabe de él es que supuestamente se ha dedicado junto a su hermano a facilitar el paso clandestino de la frontera entre Turquía y Siria de acólitos del Estado Islámico. El rastro de este hombre se sigue ahora en la capital de España. Belhoucine y la esposa del terrorista viajaron juntos en el avión de la compañía Pegasus. Al llegar a Estambul, la mujer quiso cambiar el billete de vuelta a Madrid, cerrado para el 9 de enero, y recuperar el dinero. No les fue posible, según los investigadores. El hermano, su pareja y el hijo de estos viajaron supuestamente en otro avión con el mismo destino.
El terrorista Coulibaly regresó el mismo día 2 a Francia en coche, solo, y lo devolvió el 6. Dos días después, cuando se aseguró de que su mujer y su hermano ya estaban en Siria, comenzó sus crímenes. Su esposa cruzó la frontera el 8 de enero, tras varios días en un hotel de Estambul.
Los investigadores sospechan que Coulibaly pretendía poner a su familia en manos del Estado Islámico antes de perpetrar los atentados. Consideran que el grupo viajó a España para evitar problemas, ya que es muy habitual que los yihadistas que dan el paso de trasladarse a Siria o Irak lo hagan desde otro país distinto del suyo para pasar más desapercibidos y no tener contratiempos en el aeropuerto. La mayoría de los españoles que han dado el salto lo han hecho desde Marruecos.
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