_
_
_
_
CLAVES
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Seis fantasías de Varoufakis

El ministro griego ha distribuido un pequeño ‘catecismo’ a favor del ‘no’

Xavier Vidal-Folch

El ministro griego, Yanis Varoufakis, ha emitido un breve catecismo: “Por qué recomendamos el no en el referéndum en seis cortos puntos-bala” (http://yanis.varoufakis.eu). Son seis balas fantasiosas.

1. Sostiene que la negociación “embarrancó” porque los acreedores “rechazaron reducir nuestra impagable deuda”. No es así. Sus 18 socios del euro solo fijaron que la discusión sobre la deuda se abordaría tras el pacto (luego fallido) para culminar el segundo rescate. Tras su última oferta, el día 25, Alexis Tsipras se fue a Atenas y allí convocó un referéndum, rompiendo por su cuenta las negociaciones. El sábado, 27, Varoufakis también se levantó de la mesa, ese hábito inédito desde De Gaulle. El 30, cuando expiraba la prórroga, los Dieciocho “tomaron nota” de las peticiones griegas, entre ellas, la deuda, y decidieron “esperar al resultado del domingo”.

2. Sostiene que el FMI, EE UU y muchos otros creen, “como nosotros”, que “la deuda debe reestructurarse”. Pero no hay un consenso sobre el tal “cómo”: si con repudio (como quiso Syriza), quitas parciales (como sugirió), canje de bonos (como propuso el propio Varoufakis en Londres) u otros métodos. No está el mundo contra los Dieciocho y junto a él.

3. Recuerda Varoufakis que el Eurogrupo admitió en noviembre de 2012 “que la deuda debía ser reestructurada” (en plazos y tipos). Lleva razón, pero omite que esto lo condicionó a la existencia de superávit primario, esfumado desde que él lleva la Hacienda griega.

4. “Desde el anuncio del referéndum”, la “Europa oficial” (por Jean-Claude Juncker) está presta a reestructurar: “también votaría no”, sostiene. Esta graciosa ironía esconde que Juncker fue el primero en clamar por el sí.

5. Sostiene que “Grecia permanecerá en el euro”. Pero eso puede ser mero decorado: si el BCE no te presta, da igual el euro que Babia, vas listo. Argentina estaba en 2001 en el peso, y solo funcionaban los papelitos llamados “patacones”: la ruina.

6. Sostiene que “el futuro exige una Grecia orgullosa”. ¡Horror al orgullo! No: el presente reclama una Grecia sensata, cumplidora, digna, cohesiva, próspera. Sin plutócratas-evasores ni pobres.

Y cooperativa: en la que sus ministros no vuelvan a acusar a los demás europeos de practicar el “chantaje” (como en el punto 5 del catecismo). Más aún si deben pedirles dinero extra. Por cortesía.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_