Estos son algunos de los mejores vinos blancos de España. Un viaje de Oeste a Este, terminando en La Rioja en busca de una herencia enológica y cultural inigualable
Didier Belondrade (izquierda) junto a Ángel Rodríguez. Este último es la memoria de la uva verdejo en Rueda. Sus raíces familiares en el vino se remontan al siglo XVIII.En El Bierzo nunca hubo grandes blancos. Gregory Pérez, un francés afincado en esta comarca, lo ha hecho posible. En la imagen, Pérez trabaja en sus viñas en San Juan de Carracedo junto a su mujer.Vendimia en las viñas de Raúl Pérez en Valtuille en la comarca de El Bierzo. Pérez, uno de los niños mimados de la crítica mundial, ha convertido a esta denominación en uno de los centros enológicos más calientes del planeta.Las centenarias viñas de Rafael Palacios en Valdeorras (Ourense). Hasta aquí llegó en 2000 este viticultor riojano para culminar sus proyectos de grandes blancos con la olvidada uva de godello.Sala de catas de Dominio do Bibei (Ourense). Esta bodega de ribeira sacra entre el Miño y el Sil es producto de un sueño del empresario textil Javier Domínguez.Pilar Higuero entre sus viñas del pazo de Sabariz (Ourense). Desde 2009 Pilar elabora en esta zona a orillas del Ribeiro un vino salvaje que huele a hinojo y anís.Esther Teixeiro en sus viñas de Pincelo (Lugo) colgadas sobre el Miño. Tiene 77 años y fue la primera viticultora ecológica de Galicia.El Penedés siempre se volcó en el cava. Algunos locos como Enric Soler apostaron por grandes blancos con uvas autóctonas de Torrelavit (Barcelona).El arquitecto Alfredo Arribas (centro) en su bodega de Falset (Tarragona). Arribas elabora grandes tintos en el Priorato y algunos de los mejores blancos del Montsant.Cena en Remelluri (La Rioja) con tres de los más grandes elaboradores de blancos españoles: Jesús Madrazo (izquierda), María José López de Heredia (centro sentada) y Telmo Rodríguez. Padres de Contino, Tondonia y Remelluri, respectivamente.Fin de viaje en La Rioja. Al fondo, San Vicente de la Sonsierra. En el centro con gorra, Benjamín Romeo. De su magia sale un gran blanco riojano que se llama Qué Bonito Cacareaba y en Cataluña Macizo.
