El PP se reivindica como tercera fuerza y rechaza cualquier referéndum soberanista

El Partido Popular de Cataluña se ha reivindicado como tercera fuerza del parlamento catalán en su primera intervención en el debate de investidura que ha comenzado esta mañana, al tiempo que ha exigido al futuro presidente, Artur Mas, que se aleje de posturas nacionalistas, se ciña al Estatut y haga de la crisis una prioridad. La presidenta del grupo popular, Alicia Sánchez Camacho le ha dejado claro a Mas que está de acuerdo con sus propuestas económicas, como reducir la presión fiscal, pero también lo ha advertido de que no quiere ni oír hablar de un referéndum soberanista.

Sánchez Camacho ha comenzado su intervención felicitando tanto a Núria de Gispert por su investidura como presidenta como a Mas por su victoria electoral. Palabras amables que han dado paso a una reivindicación de su papel como tercera fuerza, con el mayor número de diputados alcanzado jamás por los populares -"no estamos en la periferia, estamos en el centro de la política catalana"-, y a recordarle a Mas que cuenta con miles de votos prestados.

La líder de los populares ha exigido varias cuestiones en materia económica: que Mas elabore cuanto antes los presupuestos para 2011 y un plan de choque para luchar contra la crisis. Entre otras propuestas, Sánchez Camacho ha puesto sobre la mesa una bajada de impuestos, un plan de ahorro de 1.900 millones de euros, "reducir la regulación y el intervencionismo y menos sanciones". En este sentido ha mencionado las sanciones lingüísticas, a lo que Mas ha recordado que en España existen 300 normativas con sanción sobre el uso del castellano. "Si están en contra de las sanciones por el catalán, lo tienen que estar por el castellano", ha dicho.

Pero la popular ha rechazado de plano las propuestas del octavo bloque de la intervención de Mas esta mañana, la que habla de una "transición". Sánchez Camacho ha exigido a Mas que aclare de qué habla cuando sugiere reformar la ley de consultas, y éste le ha contestado que se trata de lograr que las consultas no tengan que ser autorizadas por el Gobierno español. "No busque usted reformas de leyes para facilitar el referéndum para el derecho a decidir", le ha pedido Sánchez Camacho.