Los empleados de la vid de Jerez paralizan las bodegas
Hacía 20 años que la actividad en las bodegas del marco de Jerez no se paraba por una huelga. Los trabajadores de la vid se plantaron ayer para reclamar la actualización de sus salarios, congelados desde 2008. Fue una muestra más de la debilidad de un sector que ha perdido el 75% de sus trabajadores en los últimos 30 años.
Desde primera hora de la mañana y hasta la medianoche, la actividad en las 30 empresas de la provincia fue inexistente, según los sindicatos convocantes, UGT y Comisiones Obreras, que pretenden desbloquear la negociación del convenio colectivo.
Centenares de empleados, fundamentalmente de Jerez, Sanlúcar y El Puerto de Santa María, exigieron ayer ante las puertas de las empresas vinateras más señeras la revisión de sus salarios "ante el chantaje de la patronal".
La Federación de Bodegas del Marco de Jerez (Fedejerez) no revisa los sueldos de sus plantillas a pesar de que una sentencia del Tribunal Supremo le obliga a aplicar una actualización de las retribuciones. "La situación es que tenemos unos negociadores del convenio que desde el primer día están bloqueando. No hay diálogo. Quieren actualizar los salarios sólo si cedemos el plus de antigüedad", explicó ayer junto a una de las pancartas Paco Orellana, responsable de la vid de CC OO.
La situación fue mimética en la mayoría de las bodegas. Los trabajadores se negaron a entrar a trabajar y se apostaban ante las puertas para exigir "un convenio digno". Si no hay avances, habrá más paros, esta vez en la vendimia.
