Dimite el jefe de la diplomacia de EE UU para América Latina

El máximo responsable de la diplomacia estadounidense para a América Latina, Arturo Valenzuela, abandonará su cargo el próximo verano, después de dos años en los que, a causa de la crisis económica y los frentes de guerra abiertos, Washington ha colocado a los países al sur de su frontera con México muy abajo en su lista de prioridades. Valenzuela se marchará en un momento en que EE UU carece de embajadores en los países del eje más izquierdista de Sudamérica -Venezuela, Bolivia y Ecuador- a raíz de conflictos políticos diversos y por las revelaciones de Wikileaks.

Valenzuela, nacido en Chile en 1944, anunció su marcha a sus empleados el jueves por la noche

mediante un correo electrónico. "Como sabrán, la universidad [de Georgetown] me concedió un permiso de dos años para prestar servicio en la Administración y esos dos años acaban esta primavera", dijo. "Aunque no se ha fijado todavía la fecha exacta de mi marcha, se producirá en algún momento el próximo verano".

Desde que ocupó su puesto, en noviembre de 2009, la gestión de Valenzuela ha sido criticada por diversos incidentes. Entre los más recientes se encuentran las revelaciones de los cables diplomáticos de Wikileaks, publicados por EL PAÍS en noviembre, que provocaron la dimisión del embajador de EE UU en México, Carlos Pascual. Posteriormente, otros cables llevaron al Gobierno de Ecuador a expulsar a la embajadora estadounidense Heather Hodges, lo que a su vez provocó que el Departamento de Estado declarara a su homóloga en Washington persona non grata.

En ese ambiente enrarecido y sin ningún logro de gran relevancia en sus dos años como asistente de Hillary Clinton en todo lo relativo a Latinoamérica, Valenzuela regresa ahora a la universidad en la que dio clases en los años previos a prestar servicio en la Administración de Barack Obama.