Aguirre traslada a los municipios que podrán endeudarse bajo tutela foral

Los municipios ya tienen la confirmación de que no deberán pasar el control de la Hacienda central para sus operaciones de endeudamiento o para las de refinanciación de deuda. El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre, se reunió a primera hora de la mañana de ayer con el presidente de la Asociación de Municipios Vascos, Eudel, Jokin Bildarratz, para despejar cualquier tipo de duda que pudiera haber sobre ese asunto y trasladarle, de primera mano, los acuerdos cerrados con la administración central, por una parte, y con los tres diputados generales por otra.

El acuerdo que cerró el Gobierno vasco con el secretario de Estado de Economía y Hacienda, Carlos Ocaña, les da vía libre para endeudarse siempre que las diputaciones ejerzan su papel de tutela respecto de las administraciones locales y eviten que se disparen sus porcentajes.

"La reforma del IRPF para las rentas altas será después de las elecciones"

El peso de la recaudación de impuestos en el PIB asciende al 17,5%

Los ayuntamientos estaban muy preocupados ante la posibilidad de no poder endeudarse, tras el plan de ajuste ordenado por el Gobierno central para contener el déficit. Las dos noticias, es decir la posibilidad de endeudarse, y la mejora de la recaudación de impuestos, permiten a las instituciones locales abordar las cuentas públicas con una mejor perspectiva.

La reunión se produjo en vísperas de la que hoy abordará el Consejo Vasco de Finanzas (CVF), y en la que Bildarratz participará como oyente en nombre de Eudel.

El CVF tiene previsto aprobar las previsiones de recaudación para este año con un incremento del 9%, el 6,5% descontando el ingreso extraordinario que supuso para las arcas forales que la administración central devolviera a la vasca el dinero recaudado por el IVA asociado a la exportación de la empresa automovilística Rover.

Pese a la recuperación de la recaudación, ésta se encuentra todavía en unos números similares a los de hace un lustro, pero recuperando el peso que tenía sobre el PIB. Si la comunidad vasca había logrado antes de la crisis que el peso de su recaudación ascendiera al 21% del PIB, en 2009 bajó hasta el 16,5%. Para 2010 va a crecer algo más de un punto hasta superar ligeramente el 17,5% del PIB.

Desglosando por impuestos, Sociedades es el que menos se recupera. En 2010 el total de lo recaudado equivaldrá a la mitad de lo que ingresaron las haciendas forales en 2007, y será similar, en números absolutos, a la de hace diez años.

Pese a todo, la situación financiera de las administraciones vascas está, de media, mejor que en el resto de España, lo que ha permitido al Gobierno defender para las diputaciones y para los ayuntamientos la excepcionalidad que les otorga el Concierto Económico a la hora de endeudarse.

Las diputaciones también se han puesto por su parte, manos a la obra para intentar recaudar más. Aunque el debate sobre una reforma fiscal se va a quedar para después de las próximas elecciones municipales y forales de mediados del próximo año, el diputado foral de Hacienda de la Diputación alavesa, José Luis Cimiano, anunció ayer que las tres diputaciones forales presentarán junto con sus proyectos presupuestarios una modificación en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Sin embargo, el objetivo de esa reforma no será el de incrementar los ingresos sino el de ayudar a los colectivos más desfavorecidos. "Se trata de atender a aquellos grupos más afectados en esta situación de crisis, como son los parados y los pensionistas", dijo el diputado alavés.

La propuesta no será estudiada mañana, sino en una próxima convocatoria del Órgano de Coordinación Tributaria (OCT), en el que también se sientan de forma paritaria, como en el CVF, las diputaciones y el Gobierno vasco.

Cimiano explicó que la modificación creará un mecanismo para que los pensionistas y desempleados integren su renta en un porcentaje inferior al 100%, para que, de este modo, "obtengan una declaración de la renta mejor que la que tendrían en condiciones normales". También se refirió a una eventual reforma del IRPF que afecte a las rentas altas, tal y como pidió la presidencia del Gobierno vasco. "En el resto de medidas hace falta un debate sereno, que no se debe efectuar a la luz de unas elecciones", dijo.

Los impuestos recaudados en Vizcaya suponen el 50,14% del total de los 11.800 millones de euros previstos por el Gobierno vasco y las tres diputaciones forales para el cierre del ejercicio de 2010, mientras que los de Guipúzcoa alcanzarán el 32,95% y los de Álava, el 16,91%.