El recorte de gastos se ceba con el sector educativo

"Disculpe, usted no reúne el perfil que hemos pedido". Así empezó el curso Diego Castillo, profesor interino de 41 años. Llegó al instituto de Móstoles donde había sido destinado y el director le dijo que no era lo que estaban buscando. "Empecé con una vacante fantasma", se lamenta Castillo, profesor de biología. Desde septiembre ha trabajado en cinco centros: Móstoles, Usera, Villalba, Las Rozas, San Blas... Clases nuevas, alumnos nuevos, adaptación al temario. Además, en Navidad se quedó sin cobrar vacaciones porque el profesor titular llegó dos días antes del fin del trimestre.

No ha sido un buen año para Castillo. Y el que viene puede ser aún peor. El último plan de ajuste de la Comunidad de Madrid se ceba con el sector educativo -donde se prevé un recorte de 40 millones- y, en especial, con los docentes no universitarios."Educación va a pagar los costes de esta crisis", explica Eduardo Sabino, de UGT. Al igual que el resto de los representantes sindicales cree que el proyecto de ley que aprobará el 28 de junio la Comunidad de Madrid tendrá una repercusión especial en el sector docente. Por ello, los principales sindicatos de la enseñanza pública (por orden de representatividad: CC OO, ANPE, UGT, CSIF, CSIT-UP) se concentrarán hoy contra los recortes ante la Consejería de Educación.

El plan de ajuste incluye una rebaja del 5% del sueldo de los funcionarios. Pero, además de adelgazarles la nómina a los profesores, el Gobierno regional prevé aplicar medidas de ahorro a costa de este colectivo como la de reducir la compensación anual por prejubilaciones de docentes con 60 años y 35 de carrera, eliminar las licencias por estudio (excedencia de un año con sueldo para labores de investigación), reducir a menos de la mitad el dinero destinado a formación y recortar en más del 60% la representación sindical, lo que supone pasar de 191 a 69 liberados, según estimaciones de CC OO y UGT.

Los interinos como Castillo, perderán el derecho que tenían hasta ahora a cobrar las vacaciones de verano a partir de cinco meses y medio de trabajo por curso. "Es terriblemente injusto que te nieguen el derecho a unas vacaciones dignas", protesta este docente, con 12 años de experiencia y cinco oposiciones a las espaldas. Aprobó la última en 2008, pero no obtuvo plaza. Ahora se prepara para la próxima, prevista el 25 de junio. Castillo, con plaza fija de operario en instalaciones deportivas del Ayuntamiento de Madrid pidió una excedencia para hacer lo que más le gusta: ser profesor. No sabe si tendrá que regresar.

Unos 4.000 interinos dan clase en Madrid, según estimaciones de CC OO. Son casi el 8% de los 50.500 profesores de régimen general. La rebaja en la prestación por vacaciones afectará a 2.000, según la Consejería de Educación, que quiere ahorrar así 7,5 millones de euros. Pero no es la única medida que les afecta. Si las prejubilaciones se frenan, no se darán más licencias anuales y habrá menos liberados sindicales, habrá menos gente a la que sustituir. Eso frenará la entrada de más de 900 interinos el próximo curso, según los sindicatos.

La Consejería de Educación mantiene que los ajustes no afectarán a la calidad de enseñanza. "No entiendo cómo a la Consejería se le llena la boca con la calidad de enseñanza cuando no nos dejan ni formarnos", protesta Sofía, interina "desde hace siglos", que prefiere no facilitar su apellido. También prepara las oposiciones del 25 de junio. Se ha presentado siete veces y, como Castillo, aprobó en dos ocasiones sin plaza. Lleva más de 20 años de interina -"20 años demostrando que soy buena en lo que hago", resume-, dando saltos de centro en centro hasta la Escuela de Arte 3 (calle de Estudio, 1), donde este curso consiguió una vacante para todo el año. Enumera las distintas materias de las que da o ha dado clase: "Imagen, comunicación audiovisual, dibujo técnico... somos chicas para todo, una vez hasta me tocó dar música". "Nos suelen designar las tareas más engorrosas, las tutorías de grupos más complicados, los peores horarios", se queja. Con los nuevos recortes, que limitan más la contratación de interinos, teme quedarse en el paro. "Se daría la paradoja de que, después de 20 años trabajando en la enseñanza, no voy a cobrar ni un céntimo de indemnización".

Bienvenido García Gundín, maestro de Primaria en un colegio de Fuenlabrada, lleva en la docencia casi el doble que Sofía: 38 años. Este profesor con plaza fija es "un doble afectado" por el ajuste: le bajará el sueldo y, si se prejubila el curso que viene con 60 años, recibirá unos 6.000 euros anuales menos en virtud de la reducción prevista por Educación, que afectará a unos 1.400 docentes, según datos oficiales. García Gundín dice que se lo seguirá pensando hasta enero. "Una de las razones para no seguir es el desánimo", reflexiona, "porque claramente el modelo de la Comunidad de Madrid es la concertada. Los niños de familias con dificultades de todo tipo se van agrupando en guetos en la pública".

A Ángel López (55 años) le toca volver el curso que viene. Es profesor de historia en Secundaria y en septiembre termina su excedencia, solicitada para avanzar en el Diploma de Estudios Avanzados (la antigua tesina). Es uno de los 284 últimos profesores que disfrutaron de esta licencia. López defiende que su trabajo Una lectura histórica del cine actual sobre la Guerra Civil le ayudará a ser mejor profesor: "Me gusta emplear el cine en clase, no sustituye al libro o al comentario de texto, pero una buena película puede ser muy motivadora para los chavales". Es contundente sobre su experiencia: "Yo haría que la licencia fuera obligatoria".

Los recortes afectan además, de lleno a la labor sindical. Pierden la mitad de fondos para hacer cursos y hay una caída drástica de la partida para representación sindical. "No vamos a dimitir de nuestra responsabilidad", advierte Paco García, responsable de Educación de CC OO. "Esto ha sido un ajuste de cuentas con los sindicatos, porque somos un elemento molesto para todas las Administraciones", según Javier Pérez-Castilla, portavoz de CSIF. Aseguran que terminarán el curso con protestas y las retomarán tras las vacaciones.