"Mi trabajo es llevar las normas al límite"
Ross Brawn (Manchester, 1954) es uno de los dos ingenieros más acreditados en la fórmula uno. Muchos le consideran, con Adrian Newey (Red Bull), el mejor y el más creativo. Licenciado en ingeniería atómica, su historial comenzó en 1976 en March y prosiguió por diversos equipos hasta que se instaló en Benetton en 1991. Allí unió su destino al de Michael Schumacher. Juntos ganaron dos Mundiales (1994 y 1995) y juntos se fueron en 1996 a Ferrari, donde marcarían un ciclo triunfador, con cinco títulos seguidos (2000-2004). Cuando Schumacher se retiró al final de 2006, Brawn se tomó un año sabático. Hizo un coche para reflotar Honda y cuando la escudería se retiró creó Brawn GP para salvar su proyecto. Su coche, equipado con un revolucionario doble difusor, fue el mejor: dio el título a Jenson Button y ganó el de constructores en 2009. Al final, vendió la escudería a Mercedes para asegurar su futuro y fichó a Michael Schumacher. De nuevo cabalgan juntos.
"Mi familia se implica mucho en mi trabajo. Mi mujer y mis hijas vienen a las carreras"
"Que piensen que soy el mejor ingeniero no me da un segundo por vuelta. Ahora no gano"
"Schumacher necesita tiempo. Estas experiencias le vienen bien para aprender"
"Me gusta pensar que el mejor equipo para Alonso es el mío, pero Ferrari es especial"
Pregunta. ¿Por qué dejó la fórmula uno a finales de 2006?
Respuesta. Estuve 10 años en Ferrari y fue un periodo muy bonito. Pero era suficiente. Quería dejarlo mientras disfrutaba, aunque parezca una paradoja. Necesitaba un descanso para reflexionar. Desde que terminé mis estudios he trabajado todos los días, así que me di un capricho.
P. ¿Su decisión fue consecuencia del adiós de Schumacher?
R. Ya lo había decidido. Cuando renové en 2004 por dos años le dije a Montezemolo que iban a ser los últimos.
P. Y, ¿por qué volvió tras su año sabático?
R. Un año fuera fue suficiente. Me gusta la F-1. Me gusta el reto que representa. Amo despertarme todas las mañanas e ir a la oficina o a la pista. Me gusta trabajar con gente. Aunque también me lo pasé muy bien viajando por el mundo con mi mujer. Porque en la F-1 viajas mucho, pero no ves nada. Y Honda me hizo una propuesta muy atractiva: tenían recursos, pero no éxitos. Sentí que podía aportar algo y encontré la motivación para volver.
P. ¿Qué aprendió fuera?
R. Me di cuenta de lo mucho que echaba de menos la F-1. Tuve que hacerme mi propio horario, porque tienes que encontrar una razón para despertarte. Aproveché el tiempo. Fui a Argentina, Nueva Zelanda, México, Rusia.
P. ¿Era más difícil vivir con la familia que regresar al paddock?
R. Mi mujer estaba preocupada porque no sabía si soportaría la vida en familia. Pero nos llevamos muy bien. Tengo mucha suerte. Mis dos hijas están casadas, así que teníamos libertad.
P. ¿Su familia soporta que se pase la vida pensando en la F-1?
R. Mi esposa me conoció antes de que me metiera en este mundo y llevamos más de 30 años casados, así que ya sabe de qué va. No siempre le gusta que pase tanto tiempo fuera, ni mis frustraciones. Pero me apoya. Sabe que es lo que quiero hacer.
P. ¿Qué es lo que más le importa en la vida?
R. Mi familia. Mi mujer viene a algunas carreras. Mis hijas y mis yernos, también. El año pasado vino mi nieto a Abu Dabi. Mi familia está muy implicada en mi trabajo. Para tener éxito y ser feliz, tienes que sentirte bien en lo que haces.
P. Mucha gente piensa que es el mejor ingeniero del paddock.
R. Bueno, ahora no estoy ganando carreras, así que no puedo ser el mejor. He tenido una trayectoria muy afortunada. Estoy muy orgulloso. Pero lo que importa es lo que está por venir. Y que la gente o tú mismo pienses que eres el mejor no significa nada, no te da un segundo por vuelta. Si tengo algún talento es conseguir que un grupo trabaje bien y disfrute del éxito. Es lo que me interesa. Y eso es lo que me gusta de Schumacher. A pesar de todos sus éxitos, sigue corriendo por el equipo.
P. Usted estrujó al límite las normas con el doble difusor. ¿Le gusta ir siempre hasta el límite?
R. Por supuesto. Es mi trabajo. Y a mis ingenieros les exijo lo mismo. Una cosa es hacer trampas y otra muy distinta enfocar las normas desde un punto de vista competitivo. Nosotros no hacemos trampas. Tenemos un enfoque agresivo de las normas e intentamos interpretarlas al límite. A veces la gente no está de acuerdo. Nunca he hecho trampas. No me arrepiento de nada.
P. En 2009 consiguió que Button fuera campeón. Este año fichó a Schumacher. ¿Es otro reto?
R. Es un gran reto. Tengo dos este año: que Michael vuelva a tener éxito y que Nico Rosberg gane algunas carreras.
P. ¿Vendió el equipo a Mercedes por problemas económicos?
R. Tuvimos mejores ofertas. Pero Mercedes es un buen socio. Le dio al equipo la estabilidad que necesita. Y me permitió hacer lo que me gusta, que es trabajar como ingeniero. Mercedes da prestigio y patrocinadores y eso nos permitirá mantenernos a flote cuatro o cinco años.
P. ¿Qué necesita Mercedes para ser el mejor coche?
R. Organización, estabilidad y confianza. En Brawn teníamos demasiadas dudas. No puedes levantarte un día y decir: "Vamos a trabajar mucho más y en un par de semanas empezaremos a ganar". Lo que hagas ahora es lo que importa en 12 o 18 meses. El coche de este año no es lo que queríamos. Pero el del año que viene lo estamos enfocando con mucha más confianza.
P. ¿Qué necesita Schumacher para volver a ser Schumacher?
R. Un poco de tiempo. Estas experiencias le vienen bien para aprender.
P. ¿Es el mismo piloto al que conoció en Ferrari?
R. Sí. Su aplicación, su disciplina, su inteligencia, su velocidad siguen ahí. Sólo necesitamos juntar todas las piezas.
P. ¿Acepta ver a Rosberg delante de él?
R. No está contento porque es muy competitivo.
P. ¿Trabajan juntos? ¿Hablan mucho entre ellos o no?
R. Tienen una buena relación profesional. No he conocido a un piloto que no quiera ganar. Y no deberían estar en este mundo si no es así. Pero no permitimos que hagan cosas por su cuenta, todas las cartas están sobre la mesa. Y habrá momentos en los que chocarán y tendrán problemas, pero es parte del negocio. Su relación es amistosa y respetuosa. Es muy poco común que dos pilotos de un equipo sean muy amigos.
P. En 2008 intentó que Alonso firmara con Honda, ¿no?
R. Sí. No sé lo cerca que estuvimos. Le dije que tendría un buen coche y fue así. Pero había incertidumbres. Fernando confiaba en mí ciegamente. Pero entiendo la atracción que ejerció Ferrari, porque yo estuve allí, y es un equipo muy especial.
P. ¿Cree que es el mejor equipo para Fernando?
R. Me gusta pensar que mi equipo es el mejor para Fernando, pero Ferrari es muy bueno. Mi ambición es ganarle.
P. ¿Alonso es el mejor piloto?
R. Este es un periodo excepcional: Hamilton, Alonso, Vettel, Schumacher, Rosberg, Button. Es una época dorada. No puedo decir que sea el mejor, pero sí uno de ellos.
P. ¿Qué puede decir sobre los pilotos españoles Pedro de la Rosa y Jaime Alguersuari?
R. Alguersuari ha mejorado mucho. Los jóvenes tienen ante sí un reto descomunal, porque no tienen un periodo de prueba. Hamilton tuvo la oportunidad de correr miles de kilómetros antes de debutar. Pedro es muy bueno, pero su equipo tiene dificultades.
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