El tribunal administrativo liberará a la justicia de 10.000 casos al año

El Tribunal Administrativo de Andalucía reducirá en alrededor de 10.000 casos al año el atasco que sufre la jurisdicción contencioso-administrativa. Ésta es la estimación que hizo ayer la consejera de Justicia y Administración Pública, Begoña Álvarez, después de que el Consejo de Gobierno diera luz verde al inicio de la elaboración del proyecto de ley para la creación de este nuevo órgano, que resolverá de forma extrajudicial los conflictos con la Administración.

El tribunal tendrá competencias, entre otros asuntos, en los relativos a la función pública, procedimientos sancionadores, concesiones y contratos administrativos, responsabilidad patrimonial y subvenciones. En principio, se ocupará de los conflictos en los que esté implicada la Administración autonómica, pero Álvarez dejó ayer abierta la puerta a que las administraciones locales puedan suscribir convenios y sumarse al nuevo tribunal.

Según adelantó Álvarez, la previsión es que el tribunal esté en funcionamiento en 2011. Su misión será agilizar los tiempos de respuesta de la jurisdicción contencioso-administrativa, que ahora tiene una demora de tres años. El nuevo tribunal se comprometerá a resolver los asuntos en dos meses.

El recorte de tiempo será posible, según la consejera, gracias a que todo el proceso se hará por vía telemática (será un tribunal "sin papeles", apuntó Álvarez) y porque en los asuntos de su competencia tienen una casuística parecida que permite respuestas similares. Esto significa que no habrá que esperar a la vía judicial para aplicar la jurisprudencia y que, aunque los ciudadanos descontentos con su resolución podrán recurrir a la justicia ordinaria, en la práctica, según la consejera, pocos lo harán. "Los ciudadanos saben que si aquí se ha desestimado su caso, es muy probable que allí también", advirtió.

El nuevo órgano tendrá sedes en Sevilla, Málaga y Granada. Será "imparcial e independiente", según Álvarez, que explicó que estará presidido por un funcionario de carrera con formación jurídica y "reconocido prestigio" que estará acompañado por ocho vocales que accederán al puesto mediante un concurso de méritos.