"En la NBA todos van a lo suyo"

Mike D'Antoni (West Virginia, Estados Unidos; 1951) entrena a los Knicks de Nueva York en la NBA, que arranca hoy con los duelos Cleveland Cavaliers-Boston Celtics (Canal+ y Canal+ Deportes, 0.30) y Los Ángeles Lakers-Los Ángeles Clippers (Canal+ y Canal+ Deportes, 3.30). Antes probó la gloria como base del Olimpia, italiano (ganó dos Euroligas, una Copa Korac, cinco Ligas y dos Copas) y técnico de ese equipo y el Benetton (dos Ligas, una Korac y una Copa en conjunto).

Pregunta. Cuando compara la NBA con la Liga italiana, ¿qué es lo que echa de menos de Europa?

Respuesta. La cercanía de los jugadores. Como viajas en un autobús durante cinco horas, te unes más profundamente. Las familias están más juntas. Es una atmósfera más universitaria. Entre los profesionales no tenemos eso. Cada uno se preocupa de lo suyo. Echo de menos eso de Europa. La vida es así. Tener buenas relaciones es más duro y creo que, además, no son tan ricas. No hay tiempo para eso. En Europa tienes la satisfacción de la cercanía del equipo. En la NBA, una situación que es un reto y que te premia a otro nivel.

"Ricky Rubio va a ser grande. En España y aquí. Tiene una gran visión del juego"

P. ¿A qué nivel?

R. Profesionalmente, entrenas a los mejores contra los mejores entrenadores del mundo. Subir de nivel es estimulante y no hay un nivel más alto que la NBA.

P. Llegó usted a Italia en 1978. ¿En qué le cambió aquello?

R. Gran parte de mí es diferente porque viví ahí. Me influyó en la manera de hacer las cosas, en comprender el mundo como una comunidad, sin estar aislado en Estados Unidos todo el tiempo. Me hizo aprender otro idioma, conocer a gente con ideas diferentes. Me hice un hombre en Europa. Bueno o malo, quizás haya sido malo, así fue. Sin duda, esa experiencia me enriqueció como persona. Leí mucho. No había televisión ni teléfonos. No había nada. Así que me puse a leer.

P. Esa aventura vital quiere repetirla Ricky Rubio, base como usted, el número cinco del draft.

R. No puedo hablar mucho de él porque es un jugador de Minnesota. Es bueno. Será bueno. Tendrá una muy buena carrera juegue donde juegue. Ahora tiene que pensar qué es lo mejor para Ricky y hacerlo. Ha decidido jugar en España y ahí será grande. Cuando venga a la NBA, también será grande. Tiene tiempo.

P. A usted se le conocía como Arsène Lupin porque robaba muchos balones. Rubio, también.

R. Principalmente, es instinto. Ricky tiene una gran visión del juego, de la pista, que se ve en cómo pasa el balón en el ataque. Creo que eso le ayuda en la defensa porque puede ver lo que va a pasar. Ve lo que va a ocurrir, el pase, y se pone en una situación que le permite robar. Son instintos que se pueden entrenar un poco, que un técnico puede mejorar, pero es un don con el que debes nacer.

P. ¿Ha cambiado el puesto?

R. Nosotros éramos más unidimensionales. Ahora, mire a Calderón... Lo hace todo. Es un buen base, un tipo fuerte, que puede tirar. En todas las posiciones son ahora mucho mejores.

P. Peter Carril, ex técnico de Princeton, dice que el nivel de la NBA está sobrevalorado.

R. Ni siquiera entiendo lo que quiere decir con eso. ¿Se refiere también a los jugadores de Europa que juegan en la NBA? ¿A los mejores de Europa? ¿No tienen ellos buenos fundamentos? Los jugadores de la NBA son los mejores del mundo. En consecuencia, ¿nadie en el mundo tiene buenos fundamentos? No estoy de acuerdo. No tiene sentido. El juego es ahora diferente. Mucho más atlético. Son mejores tiradores. ¡Mire los porcentajes! Corren más rápido, son más fuertes... Hay excepciones, pero en general son mejores ahora que hace 10 años.

P. Arranca la NBA. ¿Por qué los Knicks no juegan los play-offs desde el curso 2003-04?

R. Ha habido varios problemas. Han tomado malas decisiones y han firmado malos contratos. Nos metimos en un agujero. Literalmente. Lleva un tiempo salir de debajo de esos malos contratos y ser un equipo mejor. Todavía no lo hemos conseguido, pero estamos en el proceso de lograrlo. Los play-offs son nuestra meta. Estamos animados por tener de vuelta tras su lesión a Gallinari [su padre fue compañero suyo de equipo].

P. ¿Cuándo sintió la presión de ser técnico de los Knicks?

R. No siento más presión en Nueva York de la que sentí en Milán. Hay que ganar. Hazlo o muere. Es un trabajo duro.

P. Tiene usted la nacionalidad italiana. Silvio Berlusconi...

R. Los gobiernos van y vienen, pero el espíritu, la emoción que siento en Italia, no.