El arzobispo castrense sustituye a Cañizares en la cúpula episcopal

Sin ruido, el cardenal Antonio María Rouco ha reubicado a pesos pesados del episcopado en diócesis de categoría y en puestos ejecutivos de la Conferencia Episcopal. Lo ha hecho aprovechando el traslado a Roma de Antonio Cañizares, primado de Toledo, y la jubilación en Valencia del cardenal Agustín García-Gasco.

El arzobispo castrense Juan del Río será el sustituto de Cañizares en el Comité Ejecutivo. Otro arzobispo, Braulio Rodríguez Plaza, de la archidiócesis de Valladolid, se trasladará a la sede primada de Toledo, un puesto que pronto le reportará el nombramiento de cardenal por el Papa. Ayer fue elegido, además, el sustituto de García-Gasco en la presidencia de la Congregación para la Doctrina de la Fe (antigua Inquisición). Será el arzobispo de Granada, Javier Martínez. Carlos Osoro, hasta ahora prelado de Oviedo, ha asumido ya la vacante de García-Gasco en Valencia.

Rouco ha promovido estos nombramientos desde su liderazgo en España, pero también como miembro de la congregación encargada en Roma de nombrar los obispos en todo el mundo. En las votaciones de ayer, Del Río salió elegido por estrecho margen: 35 votos en tercera votación, en un escrutinio en el que Braulio Rodríguez obtuvo 32.

El gobierno del catolicismo español tiene seis miembros, además del cardenal Rouco: el obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez (vicepresidente); los cardenales Carlos Amigo (Sevilla) y Martínez Sistach (Barcelona), el arzobispo Carlos Osoro (Valencia); el castrense Juan Del Río, y el obispo auxiliar de Madrid, Juan Antonio Martínez Camino, como portavoz y secretario general.