Montilla pide "realismo" en el debate político sobre el futuro de Cataluña

Cataluña celebra hoy la Diada del 11 de septiembre con los partidos nacionalistas en ebullición interna y en una carrera llena de zancadillas para apropiarse del espacio soberanista. Ante este escenario, el presidente de la Generalitat, José Montilla, afirmó ayer que si Cataluña quiere solucionar sus déficit -los de carácter político y otros más terrenales, como el de las infraestructuras-, debe abrazar el "realismo". "Si lo hacemos bien, si proyectamos nuestro horizonte político desde el realismo, la Cataluña de mañana será más fuerte", dijo.

Montilla quiso calmar con estas palabras la tradicional marejada nacionalista y soberanista que suele rodear cada 11 de septiembre en Cataluña. Hasta tres veces reclamó "realismo" el presidente de la Generalitat en su tradicional discurso institucional, el primero que pronuncia José Montilla con motivo de la Diada. La demanda de Montilla no sólo iba dirigida a su rival nacionalista, Artur Mas, enfrascado desde la semana pasada en la ingente tarea de "refundar el catalanismo".

También su socio de Gobierno, el republicano Josep Lluís Carod Rovira, debió de sentirse aludido. El mes pasado, Carod, consejero de la Vicepresidencia del Gobierno catalán y líder de Esquerra Republicana, causó un nuevo revuelo político en el seno del Ejecutivo al poner fecha a un hipotético referéndum de independencia de Cataluña: el año 2014.

A la vista de este escenario, sazonado por varias plataformas independentistas que en los últimos días han lanzado todo tipo de manifiestos criticando la tibieza de los actuales partidos nacionalistas, Montilla emuló a uno de sus antecesores, Jordi Pujol, al reclamar moderación. Recordó que Cataluña ha vivido dos años "intensos" en referencia a la discusión y aprobación del nuevo Estatuto de autonomía, y pidió la confianza de los ciudadanos para desarrollarlo. Eso sí, de nuevo, "con realismo".

El presidente de la Generalitat también quiso curarse en salud ante la decisión de los dirigentes del PP de Cataluña de participar de nuevo en la ofrenda floral de hoy al monumento de Rafael de Casanova, conmemoración que el anterior equipo, el del dimitido Josep Piqué, dejó de hacer, harto de abucheos e insultos por parte de algunos sectores independentistas. En previsión de que estos incidentes puedan repetirse hoy, Montilla pidió "el máximo respeto" para "todas las expresiones y manifestaciones de nuestra pluralidad". También pedía así respeto para todos los artistas que hoy participarán en el otro acto institucional de la jornada, el que organizan el presidente del Parlamento catalán y el de la Generalitat en el parque de la Ciutadella de Barcelona y que, entre muchos otros, contará con la actuación del cantaor catalán de flamenco Miguel Poveda. Los actos de conmemoración de la Diada nacional de Cataluña se trasladarán mañana a Madrid, donde Montilla ofrecerá una recepción en la Residencia de Estudiantes.