Dudek, el héroe olvidado

Lo miras y parece mentira. Parece mentira que un día de mayo de 2005 aterrorizara con un simple movimiento de brazos a Serginho, Andrea Pirlo y Andrei Shevchenko. Parece mentira que él, desde la portería, empujara al Liverpool hacia una remontada histórica contra el Milan (3-3 al final de la prórroga, y 3-2 en los penaltis) y hacia la quinta de Copa de Europa de los reds. Parece mentira porque Jerzy Dudek, de 34 años, no es ningún gigante y tampoco tiene cara de diablo.

Lo que sí tiene es experiencia. Ése es el motivo por el que el Madrid decidió ficharlo. Tras la salida de Diego López al Villarreal, los blancos necesitaban a un segundo portero. "Cuando estaba en el Liverpool nunca pensé que podría jugar en un club más grande. Pensé que venir al Madrid sería una oportunidad. Sé que buscaban a alguien con experiencia y es algo que yo puedo aportar", aseguró ayer el meta polaco en su presentación en el Bernabéu.

"Uno nunca sabe lo que le tiene reservado el destino", dijo el suplente de Casillas

Después de siete temporadas, Helguera fichó por el Valencia por tres campañas

Dudek, hijo de un minero, sabe lo que es sufrir. Sabe lo que es ser héroe por un día y luego desaparecer. Quizás por eso habla de su futuro en el Madrid -ha firmado para las dos próximas temporadas- con cierta resignación. "Todos tenemos nuestras ambiciones y yo quiero hacer todo lo mejor para mí y para el equipo. No me preocupa la presión porque estoy acostumbrado a ella y tampoco me importa tener que competir. Siempre hacen falta dos buenos guardametas en un equipo", analizó. Uno es él. Pero el otro es Iker Casillas, titular indiscutible en el Madrid y en la selección española. Lo sabe bien Dudek, que se agarra al romanticismo y a la experiencia para convencerse de que su paso por el Madrid no estará ligado a un banquillo. La idea de Bernd Schuster es que toda la plantilla disponga de unos minutos a lo largo de la temporada. Pero los de Dudek se limitarían a los partidos de Copa.

"Uno nunca sabe lo que le tiene reservado el destino...", zanjó el arquero cuando le preguntaron si no se convertiría en una pesadilla volver a ser el suplente de un guardameta español. Y es que la aventura de Dudek en el Liverpool terminó la noche que Steven Gerard levantó la Copa de Europa en el estadio Ataturk de Estambul. Había parado dos penaltis.

A los pocos meses, Pepe Reina, por petición de Rafa Benítez, lo sustituyó en la portería. "Es difícil aceptar las decisiones del entrenador cuando juegas el mejor partido de tu vida", enfatizó el meta polaco, que ha jugado tan sólo 11 partidos en los últimos dos años. Pero añadió: "Son cosas que no dependen de mí. Siempre pensé que Reina era muy buen portero".

Sin embargo, no fue Reina quien le convenció de abandonar Anfield para recalar en el Bernabéu. Dudek pidió consejo a José Manuel Otxotorena, preparador de porteros del Liverpool hasta hace un mes. "La primera vez que el Madrid se puso en contacto conmigo hablé con él porque no sabía qué hacer. Venir aquí como suplente me parecía más de lo mismo. Me dijo que no me lo pensara dos veces, que para mí sería una situación positiva cambiar de ambiente y empezar una experiencia nueva", confesó.

Dudek no es el único que ha tomado un nuevo camino. Ivan Helguera fichó ayer por el Valencia -le quedaba otro año de contrato pero el Madrid decidió darle la carta de libertad- para las tres próximas campañas. El cántabro estuvo a punto de abandonar Chamartín el año pasado. Se quedó y acabó vistiendo el brazalete de capitán después de que el club le quitara el dorsal. Este verano no ha podido resistirse a la llamada de Quique. Decidió marcharse, después de siete temporadas con la camiseta blanca, tras haber asumido que para Schuster sería el cuarto central después de Cannavaro, Metzelder y Pepe.