Rajoy provoca una polvareda política al tachar de "cachondeo" el Estatuto

La última arremetida del PP contra la reforma del Estatuto ha levantado ampollas. La Junta, el PSOE e IU censuraron ayer unas declaraciones del líder del PP, Mariano Rajoy, en las que sostuvo que la inclusión de la expresión realidad nacional en el futuro Estatuto "es un cachondeo". El presidente andaluz, Manuel Chaves, exigió a Rajoy que rectifique su "insulto" al Parlamento autonómico, una institución que "representa al pueblo".

En las últimas semanas, diferentes dirigentes nacionales del PP se han pronunciado sobre la reforma estatutaria andaluza, intervenciones que suelen elevar el listón de la crítica, ya de por sí alto, que mantienen los dirigentes andaluces de este partido.

Estas intervenciones de dirigentes nacionales del PP en el debate político autonómico suelen poner en aprietos a sus compañeros de partido en Andalucía, un asunto sobre el que recientemente reflexionaba el ex ministro y ex militante del PP Manuel Pimentel en un artículo en este periódico (ver EL PAÍS del pasado 3 de mayo). En ese artículo, Pimentel escribía: "El PP, coherente con su postura nacional, corre un alto riesgo de no ser entendido en Andalucía. Por más que hábilmente intente argumentar que no apoya el Estatuto porque consagra diferencias con Cataluña, a la hora del referéndum muchos de sus votantes se terminarán decantando por el sí, sobre todo si bajan muchos dirigentes populares nacionales durante la campaña. Declaraciones como las de Mayor Oreja relacionando la realidad nacional andaluza con el retorno del islam se convierten de forma automática en una oleada de votos a favor del sí. Entre realidad nacional sí o no, no cabe duda de que a los andaluces les viene mejor tener tantos galones en la solapa como el que más. Realidad nacional, sí, sin duda alguna".

Este artículo de Pimentel, que fue secretario general del PP andaluz con Javier Arenas como presidente regional, ha sido premonitorio. La alusión al "cachondeo" que ha hecho Rajoy para referirse a la inclusión de realidad nacional en el Estatuto andaluz aprobado por el Parlamento causó una airada reacción de dirigentes de PSOE e IU, los dos partidos que aprobaron la reforma estatutaria el pasado 2 de mayo.

Los socialistas pusieron el acento en el hecho de que Rajoy descalifique una decisión adoptada por el Parlamento andaluz y exigieron, a través de Manuel Chaves, una rectificación del máximo líder del PP. Chaves consideró "incomprensible y lamentable" que alguien "que aspira a ser presidente del Gobierno realice estas declaraciones que insultan a la Cámara andaluza".

Preguntado ayer por las declaraciones de Rajoy, Javier Arenas evitó utilizar la palabra cachondeo, pero sí aseguró que "es muy poco serio" incluir la referencia a la realidad nacional de Andalucía en el futuro Estatuto.

El portavoz del grupo parlamentario socialista, Manuel Gracia, elevó un escrito a la presidenta del Parlamento, Mar Moreno, en la que destaca que la afirmación de Rajoy "es una ofensa evidente contra la representación y dignidad de la Cámara, así como un insulto a la máxima representación del pueblo andaluz". Dos horas más tarde, el portavoz del PP, Antonio Sanz, envió otra carta sobre unas supuestas declaraciones del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y del de la Generalitat, Pasqual Maragall, que suponen "desde hace meses" una "agresión" a Andalucía.

A ambas contestó Mar Moreno de manera flemática. Las interpretó como "gestos políticos de protestas" de ambos partidos, ante los que no puede intervenir, por su cargo institucional.

Sentimiento andaluz

Desde el Gobierno, el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, acusó a Rajoy de "insultar el sentimiento colectivo de los andaluces", informa Europa Press. "Rajoy y la derecha vuelven a cometer el mismo error histórico de menospreciar y desconocer el sentimiento colectivo de los andaluces", aseguró Zarrías.

Mientras, el coordinador regional de IU, Diego Valderas, replicó que es el PP el que "es un cachondeo, un hazmerreír", además de acusarle de hacer "el ridículo".

Entre dos aguas se movió el Partido Andalucista, el otro partido, junto al PP, que ha rechazado la reforma estatutaria. Su portavoz parlamentaria, Pilar González, afirmó que su partido ve "muy mal" que Rajoy se "burle" de Andalucía, aunque matizó que con la inclusión de "realidad nacional" es "fácil hacerlo" por tratarse de un término "ininteligible".