Cuatro presidentes de EE UU se unen para despedir en Atlanta a la viuda de Martin Luther King

Cuatro presidentes de Estados Unidos, senadores y diversas personalidades, entre ellas el reverendo Jesse Jackson, asistieron ayer en Atlanta al funeral de Coretta Scott King, de 78 años, para dar su último adiós a "la primera dama del movimiento por los derechos civiles". Desde las tres de la madrugada, miles de personas desafiaron al frío esperando su turno para ver por última vez el rostro de la mujer que hizo posible que las vidas de los negros fueran mejor y más dignas.

La multitud presenció en un profundo silencio la entrada en la iglesia de los cuatro hijos que Coretta Scott King tuvo con el reverendo Martin Luther King, asesinado en abril de 1968 en Memphis (Tennessee), seguidos por el presidente George W. Bush y los ex presidentes George Bush (padre), Bill Clinton y Jimmy Carter.

George W. Bush definió a Coretta Scott King como una de las personas o de los ciudadanos estadounidenses "más admiradas de nuestro tiempo". Acto seguido habló la alcaldesa de Atlanta (Georgia), Shirley Franklin, quien puso de relieve cómo la viuda de Martin Luther King denunció el racismo a la vez que "el sinsentido de la guerra y la pobreza".