La familia del niño palestino tiroteado dona sus órganos a un hospital israelí
Los padres de Ahmed el Jatib, un niño palestino de 12 años que murió el pasado jueves por un tiro de un soldado, decidieron donar los órganos de su hijo al hospital israelí de Haifa que le atendió.
Ahmed se entretenía con un fusil de plástico cuando recibió un disparo en la cabeza de un militar israelí. Ingresado en Ramala, a las pocas horas fue trasladado con urgencia al Hospital Rambam de Haifa, mejor equipado. De nada valió. O sí. Murió el sábado. Y sus padres decidieron donar sus órganos, sin importar la condición de árabe o hebreo del receptor.
Es de esperar que seis israelíes le guardarán gratitud de por vida. El portavoz del hospital explicó ayer que los padres donaron los órganos para "acercar los corazones y acercar la paz". Un bebé de seis meses y una mujer de 56 años compartirán el hígado de Ahmed. Su corazón ya late en el pecho de una niña de 12 años.