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Crítica:COMER
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Las ideas frescas de Aitor Elícegui

SUA se ha convertido en tres meses en el restaurante de moda de Bilbao

José Carlos Capel

Por ambientación y diseño constituye uno de los restaurantes más singulares que han abierto sus puertas en los últimos tiempos en Bilbao. Tanto es su éxito que desde el momento de su inauguración, hace tres meses, en un lugar próximo a la Gran Vía, registra llenos cotidianos.

Sua no es un restaurante al uso. Cada mediodía ofrece dos menús de 14 y 10 euros que congregan en sus mesas a personal de oficinas y clientes de paso. Por las noches, y también durante los fines de semana, entra en funcionamiento una carta cuyos platos se clasifican en tres grupos en función de las temperaturas de servicio: 25, 50 y 75° C. La pregunta es inevitable: ¿llegan los platos a las mesas con los grados anunciados? Quizá sí, pero da lo mismo. Se trata de una forma ingeniosa de evitar los bloques de todos los sitios, con la aburrida retahíla de entrantes, pescados y carnes. Para colmo, algunas sugerencias se visten con un lenguaje informático (www.fritura.com), lo que acentúa su contemporaneidad y desenfado.

SUA

5,5. Marqués del Puerto, 4. Bilbao.Teléfono 944 23 22 92. Cierra los lunes por la noche. Precio medio: entre 30 y 35 euros. Menús de mediodía, 14 y 10 euros. Gazpacho de fresones con aire de alioli, 9,50 euros. 'Tempura' de mar y huerta con soja, 11,50. Guiso lento de rabo y morros, 12 euros. Bizcocho de chocolate negro y helado de naranja, 6,50 euros.

Pan ... 5

Café ... 6,5

Bodega ... 4

Ambiente ... 7

Aseos ... 6

Servicio ... 5

Fiel a estas directrices, el cocinero vizcaíno Aitor Elícegui, mentor de la casa, ha creado unos platos de mestizaje que reúnen los sabores del mundo en distintos bocados. Recetas indefinibles, en las que se mezclan lo vasco con lo italiano, los toques chinos, nipones y tailandeses con detalles norteamericanos y franceses. Todos a precios ajustados, lo que rebaja las exigencias del comensal a la hora de enjuiciar su nivel gastronómico.

El plato mar al vapor (25°), muy agradable, contiene verduras (coliflor, brécol), queso tierno y anchoas. Y la tempura del mar y de la huerta (50°), bastante delicada, verduras variadas y langostinos fritos cubiertos por un etéreo rebozo. La mayoría de las decepciones se localizan en el bloque de 50°: la hamburguesa (burger@net), atiborrada de cosas, cuya carne se oculta entre lascas de beicon y queso, hojas verdes y mucha salsa, es un condumio impresentable; el revuelto de huevos con patatas y bacalao llega deslavazado, y el cremoso de huevo con karramarro (cangrejo) y verduras tampoco convence. Hay que saltar a la banda de los 75° para encontrar cosas de mayor enjundia. No están mal las sepias salteadas con un toffe de cebolla roja; es contundente pero muy sabroso el guiso de rabo y morros, y pasan con indiferencia las láminas de vaca con fondue de patatas.

Además de restaurante, Sua sirve desayunos por la mañana, pinchos en su barra y copas por la noche.
Además de restaurante, Sua sirve desayunos por la mañana, pinchos en su barra y copas por la noche.TXETXU BERRUEZO

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ESPACIO MULTIFUNCIONAL

EL NUEVO SUA, decorado con criterios minimalistas, no es un restaurante en sentido estricto, sino un espacio multifuncional que actúa de cafetería y bar de copas, con un pequeño rincón para leer la prensa. En la barra se sirven pinchos aceptables. Y, por supuesto, desayunos en la misma línea. Cada mediodía, la clientela accede sin reserva previa para degustar algunos de sus dos menús, que rotan de forma periódica. El menú de 14 euros incluye un bocadito (tapa-pika); un entrante entresacado del bloque de 25º C; un segundo escogido entre los que figuran en los grupos de 50º C y 75º C, más un postre y copa de vino.Los denominados Completos Sua (10 euros) no son otra cosa que platos compuestos (hamburguesa con guarnición, carpaccio de atún con sándwich integral, arroz con setas shitake y costilla a la sal), que se complementan con una copa de vino.El listado de vinos no es precisamente lo más afortunado de la casa. Lo integra una relación de marcas revueltas sin otra separación que la debida a su condición de tintos, rosados o blancos. Ninguna fecha de añada acompaña a las marcas ni ninguna alusión a su condición de reservas o crianzas en el caso de los tintos. Un verdadero desastre.En el capítulo goloso se mantiene la misma tónica que en el salado. Bajo un enunciado muy sugerente, Azucar@sua.net -2º C, se incluyen algunas sugerencias desiguales: correcto el bambú de frutas y torrija de gorgonzola, algo seco el bizcocho de chocolate negro y muy seductor el merengue de arroz con leche con helado (-2º de juanolas).

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Sobre la firma

José Carlos Capel
Economista. Crítico de EL PAÍS desde hace 34 años. Miembro de la Real Academia de Gastronomía y de varias cofradías gastronómicas españolas y europeas, incluida la de Gastrónomos Pobres. Fundador en 2003 del congreso de alta cocina Madrid Fusión. Tiene publicados 45 libros de literatura gastronómica. Cocina por afición, sobre todo los desayunos.

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