Merkel atribuye el triunfo del 'no' a la posible entrada de Turquía
La presidenta de la Unión Cristiano Demócrata (CDU), Angela Merkel, que tiene muchas posibilidades de convertirse en canciller en las elecciones de septiembre, pidió ayer en Berlín que no se sobredimensione Europa y que se dé una respuesta a las preocupaciones de los ciudadanos. En su primer discurso como candidata de los partidos de la Unión (CDU/CSU: democristianos y socialcristianos), Merkel pidió que no vale un "seguir así sin más". "Los ciudadanos tienen la impresión de que Europa no tiene límites, tanto en lo que respecta a la profundización como a la ampliación", dijo Merkel en el debate parlamentario que precedió al Consejo Europeo que termina hoy en Bruselas.
Merkel no discutió el ingreso de Croacia, Rumania y Bulgaria, pero pidió que éste sólo se permita si cumplen los criterios de admisión y que no se haga la vista gorda. Sobre Turquía, Merkel reiteró la propuesta de su partido de una asociación privilegiada en lugar de la integración plena. "Creemos que la cuestión de Turquía ha jugado un papel importante en los referendos", exclamó, para añadir: "Sería muy irresponsable negociar durante diez años con la perspectiva de la admisión completa sabiendo que en los países en los que luego se celebren referendos nunca se conseguiría una mayoría a favor del ingreso de Turquía".
El canciller, Gerhard Schröder, expresó su "poca esperanza" de que en el Consejo de Bruselas se alcance un acuerdo sobre las perspectivas financieras, pero volvió a expresar su voluntad de ceder, si bien con las limitaciones que Alemania tiene hoy. "Los recursos de Alemania son limitados", recordó.
Schröder dijo que el cheque británico "ya no tiene justificación real" y recordó que el Reino Unido es el sexto país de la UE en renta per cápita, pero en contribución neta a la Unión se encuentra mucho más abajo en la lista.
Por su parte, Merkel exigió que "los británicos se tienen que mover". "Pero no puede ser que por un lado se espere flexibilidad y por el otro se diga: para nosotros esto es sacrosanto", añadió en referencia a Francia.
