El Gobierno prevé subir la electricidad para reducir la contaminación

Las compañías eléctricas y los cinco sectores industriales incluidos en la directiva comunitaria de comercio de emisiones ya conocen cuánto dióxido de carbono podrán emitir a la atmósfera entre 2005 y 2007. Todos ellos podrán aumentar lo lanzado en los primeros años de esta década, menos las eléctricas, que tendrán que recortar un 4,7% sus emisiones. Este esfuerzo tendrá repercusión en las tarifas de la electricidad, que subirán "un poquito", según apuntó ayer la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.

Además de la compensación al esfuerzo inversor de los productores de energía, el aumento de tarifas sería también un factor disuasorio para limitar el derroche de electricidad. "Si queremos una mayor eficiencia en el uso de la energía", explicó Narbona, "va a ser difícil que eso se consiga sin elevar un poquito los precios".

La ministra presentó por fin el borrador del Plan de Asignación de Derechos de Emisión de CO2, que el anterior Gobierno debía haber entregado en Bruselas en marzo pasado. Con él se da cumplimiento a la directiva comunitaria de comercio de emisiones, uno de los instrumentos puestos en marcha por la Unión Europea para cumplir con el Protocolo de Kioto, que compromete a Europa a reducir entre 2008 y 2012 un 8% sus emisiones de gases de efecto invernadero sobre las del año 1990. A España se le permite aumentarlas hasta un 15%, pero ya en 2003 el incremento había superado el 40%.

Los planes del Gobierno pretenden estabilizar las emisiones en los tres próximos años (prevén un ligero descenso del 0,4% en el periodo 2005-2007) y fuertes recortes después, que deberían situar el aumento de emisiones en el año 2012 en el 24% con respecto a 1990.