José María Mijares, pintor
Ha sido enterrado el día 4 de abril en Miami el pintor cubano José María Mijares, considerado uno de los grandes de la plástica cubana y latinoamericana del siglo XX. Había muerto dos días antes en un hospital de Coral Gables, Florida, a los 82 años. El flaco Mijares, como le conocían cariñosamente sus contemporáneos por su quijotesca figura, había nacido el 23 de junio de 1921 en La Habana y estaba relacionado con la segunda generación de la escuela moderna fundacional de la pintura cubana, de la que fue uno de sus máximos exponentes en las décadas de los cuarenta a los sesenta, exiliándose en Norteamérica en 1968 para no volver nunca más a su isla natal. En su juventud fue amigo del pintor Fidelio Ponce de León, que influyó mucho en él y le ayudó en la precaria situación social y económica de sus duros comienzos.
Mijares se graduó en la Academia de Bellas Artes de San Alejandro en 1942, donde había tenido como maestros a Romañach y a Menocal. Su primera exposición personal fue en la Sala Hubert de Blanck de La Habana y formó parte de la muestra Pintores modernos cubanos que acogió con gran éxito el MOMA de Nueva York. Sus dibujos ilustraron repetidamente la revista Orígenes que dirigía José Lezama Lima y fue uno de los pioneros de la abstracción geométrica en Latinoamérica. Viajó a NuevaYork en 1950, después de haber ganado el Primer Premio Nacional de Pintura de Cuba, y allí se sintió cautivado por la obra de Kooning. Años después volvió con fuerza al mundo figurativo, que ya no abandonó hasta su muerte. Mijares trabajaba entre seis y siete horas diarias sin descanso (así lo hizo hasta poco antes de morir) y poblaba sus pinturas de un universo de pescadores, arlequines tristes, muchachas melancólicas, en un mosaico colorista y minucioso de estilo muy propio y personal.
En 1978 sus obras se exhibieron en el Museo de Arte Latinoamericano de la sede de la OEA en Washington, y en 2001 recibió el doctorado honoris causa en Artes por la Universidad Internacional de La Florida. Era el más cotizado de los pintores cubanos vivos y últimamente se publicaron varios libros sobre su obra y pudo por fin abrir, junto a la que es hoy su viuda, una galería personal. Su última obra importante fue en 2003 el cuadro que dio lugar al cartel del Festival Internacional de Ballet de Miami, del que era entusiasta colaborador. Según un obituario publicado en Miami estos días pasados, José María Mijares no vio cumplida su última voluntad: "Quería caminar por todo el paseo del Prado de La Habana y morir en el muro del Malecón".-
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