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Álava cede ante los nacionalistas en la Ley de Aportaciones

El Gobierno mantendrá su poder económico a cambio de inversiones por 600 millones

El País

Después de tres meses de negociaciones y tiranteces políticas, ya existe un preacuerdo para renovar la Ley de Aportaciones. Fue posible porque la Diputación de Álava renunció a su exigencia de rebajar la cantidad que las tres haciendas forales entregan al Gobierno, el llamado coeficiente vertical. El único cambio está en la actualización obligada a raíz del nuevo Concierto Económico y del Cupo. El Gobierno percibirá lo mismo que hasta ahora, aunque suba su porcentaje de un 66,25% al 70,44%. A cambio, financiará inversiones por valor de 600 millones en cinco años.

Toda la batalla política desatada desde abril se solucionó ayer en Lakua en una reunión de apenas hora y media. La Diputación de Álava, gobernada por el PP, pidió 24 horas para madurar el preacuerdo, aunque todas las partes creen que hoy dará el visto bueno. De ser así, la semana próxima se celebrará un Consejo Vasco de Finanzas extraordinario donde se aprobará la nueva normativa. La ley, sin embargo, no se aprobará hasta que la ratifique el Parlamento vasco.

El proceso no ha sido fácil. El Gobierno, apoyado por las dos diputaciones nacionalistas (Vizcaya y Guipúzcoa), no aceptaba mover un ápice el coeficiente vertical, ése que permite al Ejecutivo autónomo apropiarse de 66,25 euros de cada 100 que recaudan las tres haciendas forales. Álava pretendía reducir ese porcentaje en un 8%, aunque estaba dispuesta a negociar la cifra. Esto habría permitido a las tres diputaciones y los ayuntamientos aumentar su capacidad de financiación en más de 250 millones de euros. Al final ha prevalecido el criterio de los nacionalistas, y la ley apenas se modificará.

Las reclamaciones de Ramón Rabanera, del PP, no calaron en los otros diputados generales, los peneuvistas Josu Bergara y Román Sudupe. Ante este desigual juego de fuerzas -cinco votos contra uno en el Consejo Vasco de Finanzas-, la Diputación de Álava ha reculado. Ha admitido que no se cambie el coeficiente vertical del Gobierno y se ha acogido a la propuesta realizada por la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, por la que las diputaciones se verán recompensadas con un nuevo plan de inversiones (se llamará Plan Marco de Apoyo Financiero a la Inversión Pública) para el periodo 2003-2007. El programa supondrá una financiación a infraestructuras (carreteras, obras hidráulicas, regadíos) por 600 millones de euros, a razón de 120 millones cada año, que se repartirán entre los tres territorios según su coeficiente.

El del Gobierno no se mantendrá en el 66,25% por una mera razón técnica. Con el nuevo Concierto y el nuevo Cupo aprobados a principios de este año, las cantidades que las diputaciones en concepto de pago de la Sanidad (Insalud) y Ertzaintza pasan a computar dentro del reparto que se hace de la Ley de Aportaciones. Así, el Gobierno tendrá desde ahora un coeficiente del 70,44% -al principio de la negociación reclamaba el 70,74%-, y según ese porcentaje participará en las inversiones. El 29,56% restante se lo repartirán las diputaciones según sus coeficientes horizontales, que no sufren variaciones.

Sí cambia el Fondo de Solidaridad, el que compensa a una diputación si ha recaudado menos de lo previsto. Aunque baja del 1% al 0,75%, en términos absolutos contará con más dinero, entre un 20% y un 25% más.

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Rabanera insistirá en 2007

La Diputación de Álava admite que ha debido ceder. 'No he conseguido todo lo que queríamos', reconoce Rabanera, 'me hubiese gustado conseguir más'. Aun así, advierte de que no cejará en su empeño y cuando termine la vigencia de la nueva Ley de Aportaciones, en enero de 2007, 'pediremos otra vez la bajada del coeficiente vertical'. La Diputación de Álava lamentó ayer la falta de apoyo de Vizcaya y Guipúzcoa, y también de los ayuntamientos.

La vicelehendakari cree que el acuerdo 'es bueno para todas las partes' y, aunque admite los 'sinsabores' de la negociación, entiende que ha predominado un 'criterio de responsabilidad y de mirar por el bien del país'. A su entender, la nueva ley mantendrá la 'suficiencia financiera' para que cada una de las cuatro instituciones pueda afrontar sus respectivos presupuestos. Las inversiones del plan propuesto por Idoia Zenarruzabeitia se concretarán en el Consejo Vasco de Finanzas de octubre.

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