España pide a Guinea que reconsidere las condenas
El Gobierno español, como presidencia de la Unión Europea, pidió ayer, en un comunicado suscrito por los Quince, 'a las autoridades guineanas competentes que adopten las medidas necesarias para que sea reconsiderada' la sentencia que impone 15 penas de 20 años de cárcel a los presuntos responsables de un supuesto intento de golpe de Estado contra el presidente, Teodoro Obiang Nguema.
Fuentes diplomáticas españolas indicaron, por otro lado, que este incidente, si no se enmienda, supondrá un frenazo a la normalización de las relaciones de España con su ex colonia, que en los últimos meses ha sido visitada, sucesivamente, por el secretario de Estado de Cooperación, Miguel Ángel Cortés, y por el de Comercio, Juan Costa. El propio secretario de Estado de Exteriores, Miquel Nadal, baraja la posibilidad de viajar a Guinea Ecuatorial antes de finales de julio para preparar una eventual visita que el presidente del Gobierno, José María Aznar, realizaría hacia finales de año, en el contexto de una gira africana. Pero todos estos planes están ahora en suspenso, pendientes de la reacción de las autoridades de Malabo a la polémica sentencia.
El comunicado de la presidencia española de la UE expresa 'grave preocupación ante el deterioro de la situación política y en materia de derechos humanos' representado por este veredicto, que 'supone un retroceso en la actitud de las autoridades guineanas'.
La Unión expresa, en concreto, 'su inquietud ante las irregularidades procesales observadas, las alegaciones de tortura y la debilidad de los elementos probatorios, que contrasta con la severidad de la sentencia'. 'Todo ello', añade la nota, 'pone seriamente en entredicho el compromiso de las autoridades de Guinea Ecuatorial con la defensa del Estado de derecho' y con los derechos humanos, precisamente cuando la Comisión competente de la ONU acaba de levantar su tutela sobre Guinea. También arroja dudas anticipadas sobre el desarrollo de las elecciones presidenciales previstas para 2003.
