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Las palabras de Villar contra el sistema educativo generan una repulsa general

Imaz las considera 'inadmisibles' y el PSE las tacha de 'delirantes'

El alegato lanzado el lunes por el delegado del Gobierno contra el sistema educativo vasco fue respondido ayer con declaraciones generalizadas de censura y repulsa a sus palabras. El portavoz del Gobierno, Josu Jon Imaz, las consideró 'inadmisibles' en un representante público, mientras el PSE las calificó de 'delirantes, injustas' y merecedoras de 'reprobación política'. Partidos y sindicatos se manifestaron en contra, salvo UA, que apoyó a Villar, mientras su propio partido, el PP, guardó silencio.

Las reacciones de repulsa a las manifestaciones de Villar, que relacionó al sistema educativo vasco con la 'limpieza ideológica' del nacionalismo y la incorporación de jóvenes a la violencia callejera y a ETA, fueron ayer generalizadas y se sumaron al rechazo a sus palabras que realizó el mismo lunes la consejera de Educación, Anjeles Iztueta.

El portavoz del Gobierno, Josu Jon Imaz, valoró al término del Consejo de Gobierno que las palabras del delegado gubernamental ante los directores de la Alta Inspección de toda España, son 'absolutamente inadmisibles en un representante público' y las calificó de 'insulto' para miles de padres y profesores vascos.

Los partidos del Ejecutivo se expresaron en esa misma línea. El PNV, a través de su portavoz en el Congreso, Iñaki Anasagasti, pidió al delegado 'respeto institucional' y recordó que el presidente del PP, Carlos Iturgaiz, lleva a su hijo a una ikastola. El secretario general de EA, Gorka Knörr, pidió el cese de Enrique Villar y dijo que nunca aprobaría 'una reválida de democracia'. El Parlamento aprobó la semana pasada una iniciativa que pide al Gobierno el relevo de Villar al frente de sus responsabilidades. Anasagasti llegó a sugerir que el propio delegado busca así su traslado.

Pero no sólo de las filas del Ejecutivo salió la censura a Enrique Villar, que únicamente contó con el apoyo expreso de Unidad Alavesa, ya que su propio partido, el PP, guardó silencio. El PSE las tachó de 'delirantes' e 'injustas' y las situó en las 'antípodas' de lo que se debe hacer en materia educativa en el País Vasco, aunque matizó que 'la escuela vasca puede ser más activa en la lucha contra la ideología de ETA'. Su portavoz para temas educativos, Isabel Celaa, cree que Villar alimenta y oculta 'las torpezas' y 'falta de voluntad de diálogo' de la consejera de Educación. 'No vamos a tolerar que se utilice el sistema educativo para provocar enfrentamientos', añadió.

Comisiones Obreras, sindicato mayoritario en la enseñanza, las consideró 'excesivas y desproporcionadas', por generalizar y culpabilizar a todo elsistema por 'determinados casos' que se dan dentro de él y por la situación externa. STEE-EILAS mostró su 'indignación' y señaló que los docente 'no enseñamos odio ni adoctrinamos ideológicamente'.

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