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La Fiscalía de Valencia plantea que la Audiencia Nacional sea la que investigue las muertes de enfermos renales

El fiscal jefe de la Comunidad Valenciana, Enrique Beltrán, anunció ayer que el fallecimiento de pacientes de hemodiálisis es competencia de la Audiencia Nacional y afirmó que aceptará la inhibición del juzgado de Valencia que tramita las diligencias previas en el momento en que se las traslade. Beltrán recordó que, al margen de los seis fallecidos que fueron tratados en el servicio de hemodiálisis de la Clínica Virgen del Consuelo de Valencia, cuatro pacientes murieron tras una sesión recibida en el hospital La Princesa de Madrid y otros tres tras ser dializados en el hospital Clínic de Barcelona. Al haberse producido el presunto delito de homicidio por imprudencia en distintas comunidades autónomas, Beltrán señaló que lo más probable es que el caso se traslade a la Audiencia Nacional. Los tribunales valencianos acumulaban ayer tres denuncias, a falta de que los familiares de los otros tres enfermos fallecidos eligieran abogado.

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Mientras tanto, directivos de la empresa Baxter, proveedora de los filtros dializadores con la que fueron tratados los pacientes fallecidos, afirmaron ayer que la primera noticia que tuvieron de enfermos muertos tras haber sido sometidos a una sesión de diálisis fue el 29 de agosto, fecha en la que fallecieron tres personas en Valencia, lo que provocó que saltaran las alarmas sanitarias. Baxter realizó estas manifestaciones en una reunión que mantuvo con los representantes de la Asociación para la Lucha contra las Enfermedades de Riñón (ALCER). Durante el encuentro, los miembros de la multinacional estadounidense matizaron su desconocimiento sobre los casos de Madrid y admitieron que el hospital La Princesa les transmitió la muerte de cuatro pacientes que habían sido tratados con su filtro, pero subrayaron que les comunicaron que las muertes fueron 'fortuitas' y que 'se consideraron normales al no producirse durante la hemodiálisis', según relató la gerente de ALCER, Sagrario Valverde, a la salida del encuentro.

Las contradicciones no acaban aquí. La empresa de productos farmacéuticos también comunicó a ALCER que decidió inmovilizar los dializadores el 30 de agosto, un día después de que murieran tres enfermos en Valencia. Sin embargo, la Consejería de Sanidad valenciana y el Ministerio de Sanidad mantienen que la inmovilización de los filtros no se produjo hasta el día 31 de agosto.

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