Niños meados y cagados

Algo falla en el sistema educativo público andaluz, al menos en Sevilla. Mi hijo, de dos años, está matriculado en el colegio público San Jacinto, donde su profesora tiene a su cargo 24 alumnos. En la primera reunión a la que se nos convocó a los padres nos advirtieron de que si alguno de los niños se hacía pis o caca se intentaría localizar a algún familiar o persona responsable para cambiarlo, pues, como es lógico, la maestra no podía desatender a los otros 23 mientras ponía ropa limpia al niño en cuestión. Caso de no localizarse a nadie, el alumno permanecería en esta humillante situación hasta la hora de salida. Señora delegada provincial de Educación, señora consejera de Educación: ¿a qué esperan para poner en los colegios de enseñanza infantil la figura del monitor encargado de ayudar a los profesores en estas tareas? Si el problema es el dinero, por lo menos no vayan presumiendo sobre los logros de la enseñanza en Andalucía.Por si el problema es presupuestario, sugiero a las autoridades de Educación que empleen recursos destinados a asuntos menos prioritarios, como el programa Averroes u otras zarandajas que quedan muy bien para salir en los periódicos.- Adela Miralles Arasa. Sevilla.