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VERANO2000Consejos Médicos

La deshidratación se evita con los líquidos

- ¿Qué es? La deshidratación se debe a que el cuerpo pierde más agua y sales de las que recibe. Y esta pérdida se produce con el sudor, al respirar, con las heces, la orina y con determinados trastornos como los vómitos, las diarreas, la fiebre o los golpes de calor. Los niños y los ancianos son los más propensos a sufrir deshidrataciones. - ¿Qué hacer? Lo primero -y como norma general que nunca debe olvidarse-, es beber mucho líquido (agua, leche, zumos, refrescos). En el caso de los niños, hay que evitar abrigarlos en exceso. Se aconseja colocarle ropas de fácil manejo y que puedan quitarse fácilmente. Se recomienda, asimismo, cubrirse del sol con ropas sueltas y claras. En la playa se aconseja evitar la exposición directa al sol durante las horas centrales del día y tener siempre líquidos a mano. Ni que decir tiene que el ejercicio físico al mediodía no es recomendable.

- En una situación límite deben tomarse alimentos que proporcionen sales y agua. El gazpacho y las ensaladas son muy recomendables. Pero si se percibe algún signo de alarma, como el decaimiento, una sed excesiva, si se tiene la piel seca, los ojos hundidos, un dolor de cabeza perenne o mareos... hay que acudir inmediatamente al médico.

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