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Entrevista:IÑAKI AZKUNA | ALCALDE DE BILBAO

"La pedagogía cultural es esencial. Ningún fanatismo aguanta a una cultura abierta"

El anfitrión del 700º aniversario ha querido que el busto de Unamuno, el original, el que fue robada y localizado meses después en el fondo de la Ría, permanezca en la sala del Ayuntamiento donde una vitrina alberga la fundacional Carta Puebla. Iñaki Azkuna, nacido en Durango hace 57 años y bilbaíno desde hace 30, recibe junto al busto del escritor.Pregunta. ¿En qué le gustaría que se plasmara este aniversario al margen del Zorionak, el sello conmemorativo, etcétera?

Respuesta. Lo más importante del 700º debiera de ser que los bilbaínos y bilbaínas encaráramos el futuro con valentía, con una actitud absolutamente abierta, que recordaramos el pasado, el glorioso y el menos glorioso.

P. ¿Es el pluralismo politico, social e incluso racial, cada vez más, una característica que Bilbao debe aprovechar?

R. Bilbao se convierte en cuna de mercaderes porque carece de tierras. Desde ese punto de vista, el pluralismo se hace virtud, por necesidad quizá. En Bilbao hay además de carlistas y liberales, republicanos, monárquicos y, sobre todo, hay gente que no es nada, que se deja guiar por el sentido común. Uno de nuestros mayores acervos es el pluralismo de las ideas... aquí hay de todo, gente que se considera vasca, española, vasco-española, sólo bilbaína, del Casco o de Indautxu e incluso que no se considera nada. El pluralismo racial... eso está por venir aún.

P. ¿Qué personalidades influyentes en la vida de Bilbao carecen aún de homenaje público?

R. Creo que poco a poco estamos cumpliendo con casi todos. Quizá [el socialista] Tomás Meabe no tiene nada.

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P. De María Díaz de Haro se ha hablado poco en el 700º.

R. Sí, es que la vida está llena de intrusos. Siria es teóricamente una república ¿verdad?... pues la ha heredado el hijo del presidente Asad. Y su hermano dice desde Marbella que el heredero es él. Recalco que don Diego, el intruso, sí soñó por Bilbao. Afortunadamente su sobrina, que llegó hasta el papado para protestar por el intrusismo de su tío, también ratificó la Carta Puebla. María Díaz de Haro, que cogió el poder años después, es la segunda. El primero fue un intruso. Fíjese cómo cogió el poder Franco. Y estuvo 40 años. Es historia, guste o no.

P. Los festejos del 700º girarán hoy en torno a la Ría. ¿Para cuándo estará limpia?

R. La Ría ha sido y es tan importante que elegimos hacer el gran día alrededor de ella. Espero por Dios, la Virgen Santísima y Todos los Santos y toco madera para que haga un día decente porque si no, nos destrozan. Dicho eso, creo que la Ría va bien. El Gobierno vasco, la Diputación y el Consorcio llevan gastados 60.000 millones de pesetas en canalizaciones. En agosto se cerrarán esos boquetes que escupen inmundicias de toda la Margen Izquierda. Por las noticias que tengo, con eso estaría hecho el 70% u 80% del gran plan. Tratar los fangos exige también miles de millones.

P. ¿Está de acuerdo en que su obsesión es rebajar el nivel de enfrontamiento y elevar el nivel cultural?

R. Es una obsesión sana. El nivel cultural es fundamental. La oferta cultural de Bilbao no puede ser sólo el Guggenheim, porque ya decía don Miguel de Unamuno que "hay muchos bilbaos y muchas clases de bilbaínos". Queremos hacer una oferta cultural que llegue a todo el mundo. La pedagogía cultural es esencial en Euskadi. No hay fanatismo que aguante a una cultura abierta. Nuestra cultura tiene que ser villana, de la villa de Bilbao, solidaria con el país, pero, sobre todo, universal. No se pueden poner puertas a la cultura. La cultura bilbaína, vizcaína, y de Euskadi debe ser absolutamente abierta al mundo, sin miedo. Abierta a Castilla y al resto del mundo. Luchar contra eso, además de una inmoralidad, es ridículo.

P. ¿Percibe un nivel de enfrentamiento preocupante?

R. Lo percibo y me preocupa mucho. En Euskadi se podría vivir extraordinariamente bien. Los partidos, con nuestras riñas y desencuentros, hemos llevado al país a una crispación social que no se nota en el día a día, afortunadamente, pero sí en algunas manifestaciones. No sólo me refiero a las que van por la Gran Vía. Los que más tratamos con la gentes notamos, a no ser que seamos idiotas y ciegos, que hay una crispación que los políticos debemos apaciguar, amansar... y ¿cómo se logra? Para que las gentes hablen entre ellos, primero tenemos que hablar entre todos nosotros. Es fundamental.

P. ¿Siente alivio ahora de no haber pactado con EH?

R. Ni siento alivio ni dejo de sentirlo. Con EH no ha habido forma de pactar porque, ¡con estas cosas no se juega! Antes de pedir la independencia de Euskadi, EH se tiene que independizar de ETA. Cuando HB no tenga nada que ver con ETA y sea un partido como es debido se podrá pactar con ellos cualquier cosa. Desde el sentido democrático no es de recibo que una gente que, no digo ya condenar, sino que no rechace cualquier formulación violenta. Hablo de toda: los muertos, la kale borroka o seis energúmenos que esperan a un concejal debajo de casa. No puede ser. Pertenezco a un partido que ha tenido un sustrato cristiano y desde luego ha sido demócrata toda la vida, dictadura de Franco, de Primo de Rivera, toda la vida.

P. ¿Cuándo presentará los presupuestos?

R. No lo sé; de momento, no. Soy conseciente de que tengo 11 votos y de que necesito 15 para presentarlos. No es porque me falte o no habilidad a mí. Es por la situación del país, por la incomunicación. He estado en gobiernos con Euskadiko Ezkerra, con Eusko Alkartasuna y con los socialistas sobre todo. Y aquí ha habido gobiernos municipales hasta con el PP. Pero la violencia lo ha prostituido todo. Llegar a acuerdos puntuales es posible, pero no a acuerdos de fondo.

P. ¿Imaginaba hace un año que su equilibrio en el Ayuntamiento sería tan frágil como es?

R. Creía que todos íbamos a ser capaces de no llegar a esta situación. Con la experiencia que tengo he sido demasiado ingenuo.

P. Los socialistas le acusan de parálisis institucional.

R. Cuando uno tiene sentido democrático y quiere sacar una cosa adelante, pese a todas las dificultades, hay que saltar al ruedo. Lo tengo muy claro, dos veces les he ofrecido un pacto a los socialistas... la tercera se lo ofrezco. En vez de decir que no hay empuje ni una mayoría, siéntense a la mesa. Por mi parte y la de mi partido ha habido voluntad. De momento no ha sido posible pactar. Ha salido un Udalbiltza, un no sé qué, y no lo hemos conseguido. Pero cuando hemos gobernado juntos, ¿no hemos tenido aspectos fundamentales que nos diferenciaban? Sí. Y hemos sido capaces de pactar un programa dejando apartadas algunas cosas fundamentales en que era imposible un acuerdo. Ahora ¿qué pasa? ¿Que me ponen un listón y luego otro y otro? Es mejor que me digan desde el principio que no. Yo insisto, reconozco que estoy en minoría. No digo cosas raras. En Barakaldo y Leioa el PNV y el PSE se han puesto de acuerdo para sacar los presupuestos. Cierto que van menos cosas al pleno, la ley ha cambiado y las competencias del alcalde son mucho mayores.

P. ¿Va a salir el Ayuntamiento Bilbao de Udalbiltza?

R. De momento no hay nada de eso. Pero no creo que el mayor problema de este Ayuntamiento sea salir o entrar en Udalbiltza.

P. ¿Tiene miedo a un atentado de ETA?

R. No. No pienso en ello. Pero me puede pasar. Tengo más boletos que hace diez años.

P. Mientras siga sin nuevos presupuestos, ¿qué pasa con los planes para Bilbao, con la Alhóndiga, con Bilbao la Vieja?

R. La Alhóndiga saldrá. El Ayuntamiento tiene un retraso y nosotros estamos gestionando ese retraso. Para fin de año podría empezar a vaciarse. Albergará una mezcla de cultura y deporte. Y en Bilbao la Vieja, hace falta mucha paciencia y mucho dinero. El Gobierno vasco tiene que seguir construyendo porque la regeneración urbana es fundamental, hay zonas catastróficas.

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