Datos "sociológicos" y "socioeconómicos"
Un portavoz oficial de Telefónica aseguró que las encuestas que viene realizando la compañía en los dos últimos meses son pura coincidencia en el tiempo con esta iniciativa de informar sobre un posible comercio de los datos de sus clientes. En dichas encuestas se indaga, como admite la propia empresa, sobre aspectos de "índole sociológica, geográfica y socioeconómica". Una abonada explicó a este periódico que la compañía le preguntó telefónicamente sobre su trabajo -no sobre sus ingresos-, el tipo de líneas de teléfono que tenía y sobre si estaba abonada a algún canal de televisión digital, además de indagar sobre su grado de satisfacción del servicio telefónico."Ha sido una desgraciada coincidencia. Una iniciativa no tiene nada que ver con la otra", remacharon en Telefónica.
Mientras tanto, los ciudadanos que intentan evitar el uso de sus datos personales siguen quejádose de los problemas que deben sortear. La compañía les remite al 004, y asegura que, en todo caso, sólo se usarán el nombre, la dirección y el número de teléfono, datos que no ofrecen mayor interés comercial, puesto que ya figuran en la guía telefónica.
El 004 ofrece la dificultad de estar colapsado, como denuncia Lluís Recoder, portavoz de CiU en este asunto. Una organización de consumidores, la UCE de Cantabria, ha optado por redactar un modelo de carta para que los abonados sólo tengan que poner sus datos y enviarla a Telefónica.
La realidad es que muchos abonados no quedan satisfechos después de haber podido comunicar su deseo a Telefónica. "Si dicen que los datos que tienen ya son públicos porque están en la guía telefónica, ¿por qué nos preguntan el DNI cuando queremos borrarnos?", protesta una mujer.
Otra lectora llamó a este periódico para denunciar que en Telefónica le habían advertido de que todos los que están llamando para se excluidos de la venta de sus datos quedarán fuera también de la guía telefónica. "No es lo mismo. Yo no quiero que vendan mis datos por ahí, pero tampoco quiero dejar de aparecer en la guía porque así le resulta más fácil localizarme al primo que tengo en Asturias". Para esta mujer, las diferencias entre unos listados y otros son enormes: "En la guía sólo aparecen las iniciales, de manera que ahí nadie que no te conozca puede saber tu nombre completo y si eres hombre o mujer".
Un lector, irritado por los procedimientos de Telefónica, dio la vuelta a la tortilla y llamó a EL PAÍS para ofrecer una luminosa idea: "Se me ocurre que ya que quieren comerciar con los datos que nosotros mismos les hemos dado, que nos paguen una comisión".
