_
_
_
_
_

Condenado a 30 años el etarra Lasarte por el asesinato del concejal del PP Gregorio Ordóñez

La Audiencia Nacional ha condenado a 30 años de reclusión al etarra Valentín Lasarte por su participación en el asesinato del concejal del Partido Popular en San Sebastián Gregorio Ordóñez el 23 de enero de 1995. La sentencia considera a Lasarte cooperador necesario en el asesinato y le impone también el pago de una indemnización de 50 millones de pesetas a los herederos de la víctima. Consuelo Ordóñez, hermana del político asesinado, pidió públicamente que Lasarte permanezca en prisión el máximo tiempo posible y, en declaraciones recogidas por Servimedia, dijo sentir hacia la Audiencia Nacional "mucha más confianza" que hacia los "acojonados" jueces de San Sebastián. La madre de Ordóñez, Consuelo Fenollar, añadió que desde el asesinato de su hijo los vascos han perdido el miedo a condenar a ETA.

El tribunal, la Sección Primera Penal, condena a Lasarte al máximo de 30 años permitido por la ley por un delito de asesinato porque, aunque no fue, quien disparó el arma contra Ordóñez, estuvo vigilando a éste y llevó a los dos asesinos hasta el bar La Cepa, donde el concejal fue tiroteado mientras comía."Mira, uno menos. Ojalá que todos los etarras que han hecho lo que él estuviesen también en la cárcel", declaró Consuelo Ordóñez a Servimedia tras conocer la sentencia. La madre del concejal asesinado, Consuelo Fenollar, alcaldesa del pueblo valenciano de Terrateig, pidió a los jueces "que no le saquen en cuatro días" y añadió que la sentencia es "justa", pero también les de justicia" que Lasarte esté en prisión el máximo tiempo posible, informa Europa Press. "Si una persona es un criminal", añadio, "le condenan a 30 años y le empiezan a quitar años por una cosa u otra y eso no es justo, porque los jueces están ahí para hacer justicia"'.

Por su parte, el portavoz del Gobierno, Miguel Ángel Rodríguez, expresó la satisfacción del Ejecutivo porque las actuaciones de los terroristas no queden impunes.

Tercera condena

Esta es la tercera condena de 30 años que la Audiencia Nacional impone al activista etarra. El tribunal declara probado que en octubre de 1994, por indicación de ETA, Lasarte alquiló en el barrio de Gros, de San Sebastián, un piso donde se hospedaron, por espacio de tres meses, dos miembros liberados de ETA. En las Navidades de 1904, éstos encargaron a Lasarte que controlase los movimientos de Gregorio Ordóñez y sus itinerarios a la entrada y salida del ayuntamiento de San Sebastián, del que era teniente de alcalde.

El 23 de enero de 1995, Lasarte vio cómo entre las dos y las tres de la tarde Gregorio Ordóñez entraba en el bar La Cepa acompañado de Enrique Villar, María San Gil e Itziar Urtasun, y se sentaban al fondo del restaurante para comer. El etarra regresó al piso del barrio de Gros e informó a los liberados, decidiendo entre los tres ejecutar en ese momento el asesinato de Gregorio Ordóñez.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Lasarte y los dos liberados se dirigieron al bar, y el primero dejó. su chubasquero al etarra que iba a efectuar los disparos, indicándole en qué zona del establecimiento estaban Ordóñez y sus acompañantes y las calles por las que era más fácil huir después. Luego se separó de los otros deis en las inmediaciones del bar. Al llegar, el que había puesto el chubasquero de Lasarte entró en el restarurante, se dirigió a la mesa de Ordóñez y situándose detrás del mismo, le disparó un tiro en la nuca y salió huyendo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_