La Habana aprecia la reacción europea
Las autoridades cubanas "aprecian muy positivamente" las iniciativas que la Unión Europea y España han desarrollado en los últimos días para enfrentar a la ley Helms-Burton, que pretende sancionar a las empresas extranjeras que realicen inversiones en Cuba con propiedades expropiadas a ciudadanos norteamericanos."Europa está actuando consecuentemente en la defensa de los principios elementales del derecho internacional, y para que se respete la soberanía de los países de la Unión Europea", afirmó -ayer el vicepresidente del Parlamento cubano, Jaime Crombet.
Crombet aseguró que, con independencia de las relaciones del nuevo Gobierno español con las autoridades de La Habana, "España ha tenido una posición relativamente firme en relación con la ley Helms-Burton".
Crombet dijo que su Gobierno no había visto con agrado el reciente encuentro entre el presidente de la Fundación Nacional Cubano Americana, Jorge Mas Canosa, y el ministro español de Asuntos Extenores, Abel Matutes. "No me parece correcto, pero preferimos que sean nuestros amigos españoles quienes se formen su opinión y emitan sus criterios sobre la política que viene siguiendo el actual Gobierno español hacia Cuba".
Pesimismo cubano
Añadió que, independientemente de que Clinton prorrogue o no la entrada en vigor de la ley, Cuba no es optimista, pues los efectos negativos de la medida ya son una realidad. "No debemos esperar mucho. Estamos preparados para lo peor y para una batalla bien larga", aseguró.El funcionario afirmó que EE UU había puesto como excusa para aprobar la ley el incidente del derribo de dos avionetas de Hermanos al Rescate en febrero pasado, un suceso que aún no ha.sido aclarado y que dentro de unos días será objeto de discusión en el Consejo de Seguridad de la ONU, que debe decidir si impone sanciones o no a la isla, como pide Washington. Crombet señaló que EE UU aún no ha devuelto ni ha dicho si va a juzgar al teniente coronel que secuestró hace diez días una nave de Cubana de Aviacion y la desvió a la base militar de Guantánamo, y que de no hacerlo estará estimulando la emigración ilegal y que se reproduzcan hechos violentos de este tipo. Según las autoridades de la isla, Cuba esta interesada en respetar los acuerdos migratorios con EE UU y los rumores que desde hace días corren de que este verano podría producirse un nuevo éxodo de balseros, son alentados por los grupos anticastristas para provocar nuevas tensiones con Washington.
