_
_
_
_
GUERRA EN EL CAÚCASO

Moscú lanza un ataque aéreo nocturno contra Grozni

RODRIGO FERNÁNDEZ Una unidad de helicópteros rusos lanzó a primera hora de esta madrugada un ataque aéreo que sacudió de explosiones los arrabales de la capital de Chechenia. La torre de la televisión de Grozni, que ya había sido bombardeada en la tarde de ayer, sufrió nuevos daños tras la segunda oleada aérea, a la 1.15 de hoy. Moscú cerró anoche todas las puertas al diálogo con el líder checeno, Dzhojar Dudáiev, después de que venciera su oferta de "reunirse inmediatamente" con sus representantes. El presidente ruso, Boris Yeltsin, dio la orden para "ejecutar todas las medidas de fuerza" que estaban decididas, según un portavoz del Kremlin, quien advirtió: "No habrá más respuestas a los telegramas de Dudáiev".

Más información
Continúa la psicosis de atentados en la capital rusa

Al menos dos bombas cayeron en zonas céntricas de Grozni durante la incursión aérea nocturna. Los cristales de numerosas viviendas estallaron en una zona situada a unos 500 metros del palacio presidencial y algunas puertas volaron por los aires tras la deflagración. En la zona de la torre de la televisión, varias viviendas quedaron destruidas en los sucesivos bombardeos, que también tuvieron como objetivo la central eléctrica que suministra energía a la capital chechena.Valeri Borschov, un diputado ruso que se encuentra en Grozni, informó a la agencia Postfactum que se registró una explosión tras el sobrevuelo de aparatos rusos sobre Grozni. Sultan Takashev, portavoz de la vicepresidencia de Chechenia, aseguró a través de la agencia Interfax que helicópteros rusos atacaron las zonas de Guikalo y Priorodnoe, al este de la capital de la república caucásica.

Dudáiev, que afirmó estar dispuesto a dialogar sin condiciones previas con Moscú, se negó a viajar a la base militar rusa de Mozdok, aunque aceptó encontrarse con los delegados del Kremlim en Grozni. Dudáiev barajó ayer la posibilidad de convocar un referéndum sobre la indepencia de la pequeña república.

La reunión en Grozni fue rechazada por el Kremlin por estimar que la proposición del general rebelde carecía de todo "interés político, ya que no contiene nada nuevo", según un portavoz presidencial.

"El presidente Borís Yeltsin ha hecho un nuevo gesto de buena voluntad con el fin de solucionar políticamente la situación en la República de Chechenia", declaró ayer Viacheslav Kóstikov, portavoz del líder ruso antes de que se abrieran las hostilidades. Yeltsin, explicó su portavoz, propuso a Dudáiev que viajase de inmediato a Mozdok, la base militar rusa en Osetia del Norte, donde se coordinan las operaciones bélicas en Chechenia, para reunirse con el vicejefe de Gobierno, Nikolái Yegórov, y el director del Servicio Federal de Contraespionaje, Serguéi Stepashin, con el fin firmar un documento sobre la entrega de las armas pesadas".

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El nuevo plazo que se ofreció a Dudáiev expiró a medianoche de ayer. El Kremlin dio por caducada su propuesta al considerar que Dudáiev "no respondió a las propuestas concretas de Bosrís Yeltsin". Pável Grachov, el ministro de Defensa, después del telegrama enviado el sábado por la noche por el líder checheno a Yeltsin informándole que estaba dispuesto a negociar, había ordenado cesar el fuego contra los chechenos y "no realizar avances" ni "disparar" a menos que reciban una "orden personal" suya.

Dudáiev envió ayer otro telegrama a Yeltsin, diciéndole que está dispuesto a recibir a su representante en Grozni y que "garantiza la seguridad de su enviado plenipotenciario". Moscú fue tajante anoche al afirmar que "no habrá más respuestas a los telegramas de Dudáiev".

Por su parte, el líder checheno aludió ayer por vez primera a la posibilidad de convocar un referéndum para que los habitantes de la república decidan sobre su independencia en el curso de una conferencia de prensa celebrada en Grozni.

Posiciones estratégicas

Tras una mañana de tranquilidad en Chechenia, la aviación rusa reanudó en la tarde de ayer el bombardeo de objetivos estratégicos en los alrededores de Grozni. Las autoridades chechenas indicaron que fueron alcanzados la central eléctrica y la torre de la televisión, lo cual obligó a la interrupción de las emisiones. Algunos barrios de la capital, según las mismas autoridades, se quedaron sin energía eléctrica después de los bombardeos.

También a primeras horas de la tarde se produjeron escaramuzas en diferentes puntos de la republica. En el frente norte hubo enfrentamientos en los que, según los chechenos, destruyeron dos carros de combate rusos, mientras que en el occidental, los partidarios de Dudáiev atacaron a una unidad del Ministerio del Interior que intentaba entrar en la aldea de Bamut, a unos 50 kilómetros de la capital, y destruyeron cuatro blindados.

Helicópteros de asalto dispararon contra las posiciones chechenas a unos 10 kilómetros al norte de Grozni y la artillería rusa destruyó tres casas, según informó el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas chechenas. Los rusos, por su parte, dijeron haber bombardeado el aeródromo de Jankalá, así como haber disparado misiles contra una concentración de blindados chechenos y un polvorín en los suburbios de Grozni.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_