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El Gobierno y el M-19 reanudan sus conversaciones en México

Antonio Caño

El Gobierno de Colombia y la guerrilla del Movimiento Diecinueve de Abril (M-19) sostienen negociaciones en México con el fin de desarrollar el proceso de paz en su país y sentar las bases para un gran diálogo nacional. Las conversaciones, que debieron haber comenzado el viernes, fueron suspendidas hasta ayer como muestra de rechazo por el asesinato en Bogotá de un dirigente izquierdista.Tanto los representantes del M-19 como del Gobierno condenaron la muerte en atentado de José Antequera, dirigente de la Unión Patriótica, de tendencia comunista. Por parte del M-19 participan en la reunión de México el número dos de la organización, Antonio Navarro Wolf, y otros comandantes de la dirección del movimiento, mientras que el Gobierno está representado por el asesor para la paz (te la presidencia, Rafael Pardo, quien el pasado 10 de enero firmó un acuerdo con el M-19 para favorecer la incorporacién de ese grupo a la vida política.

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Las conversaciones de México, que la pasada semana fue también escenario de una reunión por la paz en El Salvador, tienen por objeto estudiar las condiciones que permitan cumplir con lo acordado hace dos meses en las montañas del departamento colombiano de Toluca, uno de los más afectados por una ola de violencia que el año pasado causó la muerte de 10.000 personas en todo el país.

Antonio Navarro explicó que esta reunión no es en sí una negociación, sino "un prediálogo". "Estamos tendiendo la mesa en la que se va a sentar la nación colombiana y preparando la lista de invitados", dijo el dirigente guerrillero.

"No estamos negociando, estamos preparando el camino para negociar", afirmó Antonio Navarro, quien explicó que el temario de la reunión será: la distensión en el interior de Colombia y la discusión de un programa del próximo diálogo nacional, en el que deben participar, según el M-19, el Gobierno, los seis grupos guerrilleros activos en el país y la sociedad civil.

Los representantes del Gobierno manifestaron que acudieron a la reunión de México con el ánimo de reactivar el proceso de paz abierto en el país a partir del secuestro del dirigente conservador Álvaro Gómez. A este proceso se sumó esta semana la guerrilla comunista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) con la declaración de un cese el fuego unilateral. Una de las ambiciones del M-19 es sumar a la mesa de negociaciones a las FARC y a las otras organizaciones rebeldes, pero éstas dudan de las intencíones del M-19 y han declarado públicamente sus sospechas sobre el diálogo que se celebra en México.

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El interés particular del M-19 será la búsqueda de garantías para su actuación política legal. En este sentido, Antonio Navarro anunció que en los próximos días saldrán a la luz pública una docena de dirigentes de la organización -lo que él llamó "los doce apóstoles" - para que actúen como portavoces del movimiento.

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