Un amigo de Estados Unidos
Formado en la escuela militar de Sant Cyr, en Francia, el general Zine el Abidin Ben Alí, nombrado el pasado 2 octubre primer ministro por Habib Burguiba, llega a la presidencia de la República tras una meteórica carrera.La imagen de Ben Alí es la de un hombre duro, disciplinado amante de imponer la ley y el orden y un trabajador infatigable.
Nacido en 1936, el nuevo jefe de Estado tunecino fue confiado desde muy joven a tareas relacionadas con la seguridad militar, y a los 22 años es ya director de ésta.
Ben Alí realiza cursos de espionaje y contraespionaje en varios centros especializados de Estados Unidos, país al que se le vincula.
Obtiene el diploma de Estado Mayor, y en 1974 es agregado militar de Túnez en Marruecos.
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En 1977, Ben Alí abandona el uniforme militar y se viste de civil para ocupar la Dirección General de la Seguridad Nacional.
Desde ese año, su carrera se desarrolla en medios policiales, salvo cuatro años que reside en Varsovia como embajador de su país en Polonia.
Su último ascenso como militar fue en 1979, cuando obtuvo el grado de general.
Ben Alí fue secretario de Estado para la Seguridad durante los sangrientos sucesos del pan en enero de 1984 (94 muertos) y ministro del Interior desde 1986.
El nuevo mandatario del país norte africano es considerado el artesano de la lucha contra la represión integrista, lo que le valió esa cartera.
Ben Alí estrenó su cargo de primer ministro en la víspera de la ejecución de dos integristas.
Entre las frases políticas formuladas per el mandatario tunecino destaca ésta: "Lo único que han logrado hasta ahora las tentativas oscurantistas es reforzar el acatamiento del pueblo hacia su líder Burguiba".
El nuevo presidente de Túnez se casó en 1962 y tiene tres hijos.
