_
_
_
_
_

El DC-8 dañado tiene 21 años, y el sustituto, 24

El avión DC-8 utilizado por los Reyes en su gira por EE UU y cuya avería, que motivaba una pérdida de aceite en uno de sus cuatro motores, ha retrasado el regreso de don Juan Carlos a España fue comprado hace 21 años a la constructora, Mc Donnell Douglas, por Iberia, que lo revendió al Ejército del Aire hace once, según informó un portavoz de la compañía aérea española. El DC-8 de la Fuerza Aérea Española, según esta fuente, enviado ayer desde Madrid a la base de Andrews para sustituirlo tiene 24 años de antigüedad y fue comprado por Defensa hace 14.Ambos aviones forman parte de la flotilla utilizada para al traslado de autoridades de la nación, como el Rey o el presidente del Gobierno; de visitantes distinguidos -el presidente de Guinea Ecuatorial o el Papa- y de reclutas entre la península y Canarias. Su mantenimiento corre a cargo de la compañía Iberia, cuyo gabinete de Prensa afirmó ayer que estos aparatos pasan cuatro tipos de revisiones periódicas, amén de las que se realizan antes y después de cada vuelo.

Más información
La avería del avión del Rey, último percance de una accidentada gira por EE UU

El pasado 17 de junio el DC-8 enviado ayer a la base de Andrews, con el presidente Felipe González a bordo, tuvo que regresar al aeropuerto de Brasilia a los dos minutos de iniciar vuelo debido a un fallo mecánico. La compuerta que le unía al tractor que le remolcó en pista no cerró correctamente, lo que a su vez dificultó el cierre del tren de aterrizaje.

El fallo fue detectado en pleno vuelo y fue subsanado tras el aterrizaje. La revista Tiempo se hacía eco días antes de un informe de la constructora de ambos aparatos, en el que se advertía del riesgo que sufrían dichos aparatos, debido a la fatiga de vuelo, de experimentar fisuras en el fuselaje, principalmente en torno a las puertas y esquinas del avión.

El Cuartel General del Aire, según confirmaron ayer, consideró innecesario someterlos a una revisión especial. Su alto nivel de ruido hace que tengan prohibido aterrizar en diversos aeropuertos occidentales. Por este motivo, el DC-8 tuvo que recibir un permiso especial para tomar tierra en el aeropuerto internacional de San Francisco, según informó Efe.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_