Marchais no será candidato en las presidenciales francesas de 1988
Georges Marcháis anunció el lunes, en la última reunión del Comité Central del Partido Comunista Francés (PCF), que no será candidato en las próximas elecciones presidenciales, previstas para 1988. La decisión del secretario general del PCF ha sorprendido en los medios políticos franceses, donde ya se especula sobre el candidato comunista y la sucesión de Marcháis en el partido.El dirigente comunista aseguró que seguirá siendo secretario general, pero algunos destacados militantes de su partido estiman que se trata de una "prejubilación". Bajo la dirección de Georges Marchais, el PCF ha experimentado un declive electoral permanente y a pasado de ser el primer partido de la izquierda a obtener sólo un 10% de los votos en las pasadas elecciones legislativas, lo que le sitúa al mismo nivel que la extrema derecha de Jean-Marie le Pen.
Portavoces del pequeño sector renovador, duramente combatido por Marcháis, explicaron que su decisión de no presentarse a las elecciones presidenciales no modifica la tensa situación actual. "Los críticos seguimos haciendo frente a una dirección inmovilista", añadieron.
Otras fuentes comunistas resaltan, sin embargo, que el relevo ha quedado abierto y que Marcháis perderá inevitablemente parte de su influencia al situarse en un segundo plano, tras la personalidad que sea designada como candidato. Entre los nombres que circulaban ayer por París figuran los de Charles Fiterman, ex ministro de Transportes, y André Lajoine, mano derecha de Marchais. Fiterman tiene fama de ortodoxo, pero alcanzó una cierta notoriedad por su gestión ministerial, calificada de pragmática y tecnocrática. Los sondeos indican que es tres veces más popular que su partido.
Georges Marcháis, que tiene 65 años, explicó que se trata de "una decisión personal adoptada hace tiempo" y pidió al Comité Central que designe un candidato "en breve plazo". El secretario general no descartó la posibilidad de que se celebren elecciones presidenciales anticipadas. Marchais fue candidato en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de 1981, en las que obtuvo un 15,3% de los votos. En la segunda, se retiró para favorecer al socialista François Mitterrand.
