El periodista Alfonso Rojo temió por su vida

Alfonso Rojo, enviado del periódico español Diario 16 a Nicaragua y detenido por la Guardia somocista, declaró ayer, tras ser puesto en libertad, que «hubo un momento en que pensé que podría ser asesinado».Nuestro colega denunció los malos tratos a que fue sometido en Estelí por parte de un individuo paramilitar y un fotógrafo del diario gubernamental Novedades, «quienes, tras golpearme, me despojaron de la documentación y el material filmado».

Rojo desmintió las alegaciones del régimen de Somoza, en el sentido de que había tomado parte en la planificación del asalto sandinista contra la ciudad de Estelí.

«La detención la atribuyó -dijo- a lo incómodo que resulta para el Gobierno de Managua la presencia de un periodista objetivo e imparcial en el mismo campo de batalla.»

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