La principal base naval española estará en Canarias
ENVIADO ESPECIAL, Este mismo año van a iniciarse los trabajos de la gran base naval de Gran Canaria, según confirmó ayer el presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, en un almuerzo celebrado con los informadores en Las Palmas, penúltima etapa de su visita a las islas Canarias. Sobre la posibilidad de emplazar una o más bases aéreas en las proximidades de la naval, todavía no se ha adoptado un acuerdo, por depender de factores en estudio. El presidente del Gobierno se refirió también a la necesidad de erradicar las situaciones de injusticia dentro de cada una de las islas del archipiélago para quitar toda cobertura interior al servicio de los intereses de potencias extranjeras.
Aunque en la rueda de prensa se tocaron otros importantes temas -se anunció que Martín Villa presidirá la Junta de Canarias-, la atención se centró sobre la defensa de Canarias, dado que durante este fin de semana el señor Suárez dedicó gran parte de su trabajo a reuniones y contactos con las Fuerzas Armadas.El presidente del Gobierno explicó que sus reuniones con el Unicam (Mando Unificado de Canarias), con la Junta de Jefes del Alto Estado Mayor y otras autoridades militares han tenido como objetivo esencial repasar con detalle toda la situación defensiva del archipiélago, enmarcado dentro de la política de defensa nacional y sin ninguna conexión con la política defensiva occidental. «Es evidente -dijo- que al existir una nueva política general del Estado, de ella se deriva una adecuación de la política de defensa.»
Afirmó que no podía ser muy explícito dado el carácter reservado de la materia, por cuanto afecta a la estrategia de la defensa nacional y de las islas Canarias, pero recalcó que todo estaba lo sufic¡entemente bien preparado como para que no haya temor alguno.
«Estamos trabajando en un plan de modernización de las Fuerzas Armadas que está enmarcado dentro de la ley 32/71, pero que en estos momentos, como consecuencia del incremento del coste de todo el material militar, es preciso una adecuación del mismo en la medida de lo posible y siempre que las disponibilidades presupuestarias o aquellas que se adopten con carácter extraordinario lo permitan en un plazo de cuatro años», dijo Suárez.
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Suárez anuncia la creación de una gran base naval en el archipiélago canario
(Viene de primera página)«Ya saben ustedes -añadió-que el Gobierno tomó la decisión de establecer una base naval en Canarias y esto parece lógico dada la situación estratégica. No les indico evidentemente cuál va a ser el coste de este proyecto, porque tiene que estar adecuado a la ley 32/71 y, en consonancia, con aquellas otras necesidades derivadas de la absolescencia de algunos medios militares que actualmente conviene reforzar.»
Se reafirmó en que a construcción de la base naval no está relacionada con la defensa atlántica y no tiene nada que ver con la decisión que un día adopte el Parlamento sobre las diversas alternativas del encuadramiento de España en la defensa occidental. "Entre otras cosas, -dijo-, porque el archipiélago está fuera de los límites geográficos de actuación de la OTAN.»
El señor Suárez afirmó que estaba totalmente claro lo relativo a la creación de la base naval, y aunque se considera imprescindible reforzar la. flota aérea, el acuerdo sobre este tema no se adoptará hasta que esté terminado el estudio que actualmente realiza la Junta de Jefes del Alto Estado Mayor.
Aunque el presidente del Gobierno no facilitó información sobre el proyecto de la base, ni sobre su coste, ha trascendido que el presupuesto se aproxima a los 15.000 millones de pesetas y constará de cinco muelles de abrigo para concentrar a toda la flota simultáneamente.
En otro orden de cosas, afirmó que nada mejor para garantizar la estabilidad política del archipiélago que erradicar del mismo las situaciones de injusticia para evitar su instrumentalización al servicio de intereses exteriores.
Para erradicar esas situaciones de injusticia -muchas y graves, según sus palabras- el presidente considera imprescindible que haya una planificación de la actuación estatal en perfecta colaboración con las entidades financieras y crediticias, así como con los cabildos y ayuntamientos. «A eso hemos venido -añadió-, a contrastar opiniones y no sólo a conocer las necesidades, sino a fijar las prioridades.» A falta de contactar con las entidades locales de Fuerteventura y Lanzarote, el presidente estima que su visita al archipiélago ha sido muy fructífera.
Fue preguntado el señor Suárez sobre las razones que le han llevado a marginar a la Junta de Canarias en su periplo por las islas. La justificación que dio es que los contactos del presidente con los órganos de gobierno preautonómicos no se producen en tanto no se constituye la comisión mixta de transferencia, por entender que hasta entonces no hay materia de la que tratar.
A este respecto hay que señalar que no siempre ha sido así, porque al margen de los contactos con el señor Tarradellas -el caso catalán según el Gobierno es un caso especial-, el Consejo General vasco fue recibido por el señor Suárez en el palacio de la Moncloa cuando todavía se desconocía quiénes iban a ser los miembros de la Comisión Mixta por la parte gubernamental.
Interpelado sobre si reconocía la legalidad de la Junta de Canarias, el señor Suárez dijo que ese reconocimiento, dado que ha sido interpuesto un recurso, tienen que efectuarlo los tribunales.
Respecto a la crisis de UCD de Canarias admitió que los problemas son muchos, pero «son míos y me van a permitir que no hable de ellos; debemos resolverlos con paciencia y reflexión precisas y con la energía que convenga en cada instante». Añadió que se ha concedido un período de «información reflexiva», entre otras cosas porque está convencido de que el tiempo siempre ayuda algo.
También fue preguntado por el plan de acción económica sobre Canarias, a lo que respondió que todavía no están en condiciones de dar cifras porque la visita no ha terminado. El problema, explicó, tiene dos vertientes: la mejor utilización de los recursos presupuestarios disponibles para solucionar las necesidades urgentes y, por otra parte, la planificación concienzuda de la acción a medio y largo plazo, todo ello relacionado con el cuadro global del país.
Aunque reconoció que ningún problema de los que se dan en las distintas regiones españolas admite demora, el señor Suárez recordó que toda la nación, como se reflejó en el Parlamento, es consciente de que la resolución de los problemas canarios es inaplazable.
Finalmente se le preguntó por la posibilidad de -como le había sido sugerido al presidente- que se hiciera de Canarias un paraíso bancario con cuentas numeradas a fin de aprovechar su situación estratégica en el comercio mundial. El presidente del Gobierno manifestó que formalmente no se le había hecho esa petición, pero que de cualquier forma no encajaba con la política fiscal que el Gobierno está llevando a cabo.
