Se prepara una nueva normativa sobre la edificación
La Dirección General de Arquitectura y Tecnología del Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo elaborará en el plazo de dos años seis normas básicas de edificación y veinte normas tecnológicas, según una orden ministerial que se publicó ayer en el Boletín Oficial del Estado. Además del programa mencionado se revisarán otras veinte normas tecnológicas de la edificación y se catalogarán soluciones homologadas, todo, ello conforme a la normativa de edificación aparecida en un Real Decreto del 10 de junio de 1977. La normativa de Edificación a que se refiere el decreto distingue tres grupos de actuaciones: en primer lugar las Normas Básicas de Edificación (NBE) que son aquéllas que, a partir de los fundamentos del conocimiento científico y tecnológico establecen las reglas necesarias para su correcta aplicación, dentro de las que se integran de los edificios. Tienen como finalidad fundamental defender la seguridad de las personas, establecer las restantes condiciones mínimas para atender las exigencias humanas y proteger la economía de la sociedad.
Como consecuencia de estos fines las Normas Básicas de Edificación, dentro de las que se integran las acciones de la edificación, acero laminado para estructuras de edificación, cálculo de las estructuras de acero laminado, tornillos, perfiles huecos, muros resistentes de fábrica de ladrillo e impermeabilización de cubiertas- son normas de obligado cumplimiento para todos los proyectos y las obras de edificación.
El segundo grupo de actuación sobre el que se elaborarán veinte normas, se refiere a las Normas Tecnológicas de la Edificación (NTE), que serán revisadas por el Ministerio, sin olvidar que estas normas no son de obligado cumplimiento al poderse adoptar otras normas que cumplan igualmente las disposiciones básicas. El tercer grupo de actuación se refiere a la elaboración y homologación de Soluciones Homologadas de Edificación (SHE). cuya utilización correcta garantiza el cumplimiento y la superación de los niveles mínimos que establecen las Normas Básicas de Edificación.
Actualmente la normativa que se aplica a la edificación se compone de un conjunto de disposiciones de rango administrativo diferente, sin que aparezca delimitada claramente la frontera entre lo que es obligatorio y lo que es facultativo, lo cual puede ser fuente, y de hecho lo es, de dificultades interpretativas que pueden afectar directamente a todas las personas relacionas con el proceso de la edificación y con el uso de los edificios.
